En el complejo mundo de la comunicación humana, los malentendidos son como sombras que se interponen entre los interlocutores, oscureciendo la transmisión efectiva de pensamientos y emociones.
Desde su nacimiento, Thea ha sido una dama: lo demuestran las sonrisas que regala a los extraños, su forma de hacer reverencias y los vestidos que nunca ensucia