Los sismos del mes de septiembre no solo devastaron viviendas, carreteras, puentes y edificios públicos, también 333 monumentos históricos y ocho zonas arqueológicas, entre ellas Monte Albán, con dos pirámides seriamente afectadas, declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Las zonas arqueológicas de Monte Albán, Atzompa, Mitla, Lambytieco, Yagul, Dainzú, Guiengola y Copalita, tuvieron afectaciones de menores a medianas, sin embargo todas permanecen abiertas al público.
Entre los monumentos históricos con daños severos se encuentran el palacio municipal, la casa de la cultura y el templo dedicado a San Vicente Ferrer del municipio de Juchitán de Zaragoza, así como el exconvento de Tehuantepec.
El palacio municipal de Juchitán de Zaragoza fue edificado por Francisco León en 1860; frente al jardín central donde se encuentra colocado el busto de Don Benito Juárez y en la parte poniente el busto de Doña Margarita Maza de Juárez, entre otros monumentos.
En tanto que la casa de la cultura es una construcción de finales del siglo XIX, que fue adaptada para albergar la Casa de la Cultura de Juchitán.
La Casa de la Cultura Lidxi Guendabiaani fue fundada en el año de 1972, a iniciativa del pintor juchiteco Francisco Toledo, quien realizó gestiones ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
Para conservar su estado arquitectónico, había recibido tres remodelaciones, la primera en el año de 1972 con el maestro Francisco Toledo, la segunda en los noventas y finalmente en el 2010 con un apoyo de 15 millones de pesos otorgados por el gobierno del estado de Oaxaca.
En tanto la iglesia católica dedicada a San Vicente Ferrer fue construida entre 1544 y 1551 toda vez que en ese tiempo la imagen de bulto del santo fue llevada a Juchitán por los frailes dominicos Alburquerque y Beteta.
Posiblemente también por esta época los recién llegados españoles le antepusieron el nombre de San Vicente al pueblo cuyo nombre (San Vicente Juchitán), conservó hasta 1889 cuando fue elevada a la categoría de Ciudad de Juchitán de Zaragoza por la Cámara de diputados local de ese año, siendo el General Albino Zertuche gobernador del estado,
Por su parte, el ex convento y templo de Santo Domingo, del municipio de Tehuantepec, fue construido por la Orden de los Dominicos por Cédula Real del 8 de septiembre de 1543. En este periodo destaca y se autoriza la construcción de conventos en pueblos indios.
La construcción del convento inició un año después, en 1544, dirigido por el padre Alburquerque y con el peculio del último rey de Tehuantepec, Cosijopi, quien acepta su conversión al catolicismo.
