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Camellón de la Central de Abasto, de los más peligrosos de Oaxaca

Foto(s): Cortesía
Giovanna Martínez

Hace 11 años, en agosto de 2012, fue inaugurada la primera etapa del rescate del río Atoyac en la capital oaxaqueña, por el gobierno estatal; en la actualidad, atrás quedaron las ganas de las autoridades por embellecer este espacio que ahora alberga basura y a personas en situación de calle.

Atrás quedó la esperanza de comerciantes y habitantes aledaños a la Central de Abasto, de que autoridades volteen la mirada a esta zona considerada como uno de los lugares más peligrosos de la ciudad de Oaxaca.

Colonos aseguran que hace algunos años, el gobierno estatal del 2012 trató de rehabilitar un camellón para que las familias de la zona pudieran contar con un lugar de esparcimiento. Pero debido a los cambios de autoridades, el proyecto fue abandonado y hoy tiene un mal aspecto.

El camellón que se encuentra entre las riberas del Atoyac y la Central de Abasto, a un costado de la Terminal de Segunda Clase, era usado como tiradero de desperdicios, por lo que la administración estatal del año 2012, transformó el área en un espacio verde.

El 10 de agosto de 2012 fue inaugurada la primera etapa del rescate del río Atoyac, un proyecto al que le fueron invertidos más de 15 millones de pesos. Fueron colocadas tres fuentes, una de ellas hecha de piedras de río; además de pasto, árboles y flores de diferentes colores, así como gravilla de color blanco para hacerlo más atractivo.

Además, fue ampliada la banqueta y colocados postes de iluminación por celdas solares, para ahuyentar a la delincuencia por la zona, que normalmente se encuentra a oscuras. Así mismo, las áreas verdes eran humedecidas con agua tratada del río Atoyac cada determinado tiempo, con la ayuda de aspersores. 

Por las noches, la fuente principal era iluminada por luces de colores que se colocaron a los lados al nivel del suelo.

En ese entonces, los vecinos agradecieron que por primera vez en 20 años, un gobierno volteaba a la Central de Abasto, pues esta es considerada una de las zonas más delictivas de la ciudad.

Abandonan el proyecto

Pero la ilusión les duró poco, pues tras el cambio de administración gubernamental, el proyecto fue abandonado.

Hoy, a once años, NOTICIAS Voz e Imagen de Oaxaca realizó un recorrido por el área, donde árboles y palmeras se secaron al igual que el pasto y las flores que adornaban las fuentes; además, fue retirada la gravilla blanca.

Los pocos árboles que sobreviven están secos y la fuente principal ya no tiene agua, evidencia del abandono.

Además, los automovilistas abrieron una ruta para incorporarse al carril del sentido contrario, pasando por encima del camellón, lo que con el paso del tiempo ha removido la tierra y marcado el paso de las llantas de los vehículos.

También se puede observar basura y acumulación de tierra, grava, producto de la división del camellón para la rotonda de los automóviles. 

“De ahí, ninguna autoridad ha venido e intentado rescatar este proyecto que le costó millones de pesos a los ciudadanos, porque esto fue construido con nuestro dinero y hoy luce deplorable”, expresó Silvia Enríquez, vecina de la zona. 

Depósito de desechos y perros callejeros

De acuerdo con la mujer, el lugar sirve como dormitorio de personas en situación de calle, quienes acarrean basura y plástico para armar estructuras que ocupan de viviendas. Ahí hacen sus necesidades fisiológicas y tiran basura. 

Este camellón hasta el que abarca a la colonia Arboleda, son usados como estacionamiento de los comerciantes que llegan a la vendimia de los martes y jueves en la Central de Abasto.

Existe también un problema de acumulación de basura, ya que desde que cerró el basurero en Zaachila, el playón de las riberas del Atoyac es usado como depósito de desechos, lo que ha contaminado la zona, principalmente de bolsas de plástico y lixiviados que contaminan el suelo y ha originado la propagación de plagas como ratas, cucarachas y perros callejeros.

 

Para saber

  • Ayer era un parque con áreas verdes y fuentes iluminadas.
  • Hoy luce seco y sin vida, las fuentes no funcionan y hay basura.
  • Suman once años de abandono.
  • Son 15 millones de pesos lo invertido.

 

“De ahí, ninguna autoridad ha venido e intentado rescatar este proyecto que le costó millones de pesos a los ciudadanos, porque esto fue construido con nuestro dinero y hoy luce deplorable”. Silvia Enríquez, Vecina

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