SAN NICOLÁS QUIALANA, Zimatlán, Oaxaca.- Ser mujer y productora, en Oaxaca es sinónimo de abandono institucional; para las hermanas Reyes Calderón, mantener la cosecha de fresa durante más de 35 años, ha sido una lucha constante entre trámites burocráticos e insensibilidad.
Originarias de San Nicolás Quialana, Flora, Aída, Laura, Socorro, Gema, Zoila, Beatriz y Anselmo Reyes Calderón, cada año han sembrado esta fruta rica en vitamina C, antioxidantes y diuréticas que ayudan a regular los niveles de colesterol en la sangre.
Las hermanas Reyes Calderón aprendieron a cultivar la fresa gracias a su padre, don Timoteo Reyes Castro, un inmigrante enamorado de su tierra y el campo, quien aprendió todo de la cosecha de la fresa durante su experiencia fuera de su comunidad, como jornalero.
Familia fresera
La situación económica en Oaxaca, con los años se agrava y en la actualidad son pocas las ganancias que salen de la fresa; a pesar de esto, las hermanas Reyes no se dan por vencidas, sobre todo porque con esto, mantienen viva la memoria de su padre, quien les heredó el gusto por la siembra.
“Mientras Dios nos dé salud, continuaremos con la cosecha de fresa”, aseguran.
Esto, a pesar de que existen voces que les sugieren que ya no deberían trabajar en el campo, por su condición de mujer y la edad, además de que el trabajo en tierra fértil representa un desgaste físico y económico.
Las fresas se asoman entre las hojas FOTO: Giovanna Martínez
Pero para ellas es imposible dejar esta actividad, debido a que significa abandonar la herencia y amor de sus padres don Timoteo Reyes y Taide Calderón López.
Muchas necesidades
La cosecha este año se retrasó, debido a la falta de lluvias, por lo que apenas a mediados de marzo empezaron a cosechar el fruto. La fresa requiere de un riego frecuente y en Quialana no hay suficiente apoyo de agua, por lo que han tenido que recurrir a la compra de pipas.
Las necesidades de estas productoras van desde la cintilla de goteo, postes de luz, hasta pozos profundos para regar la cosecha.
Cada año, la preocupación principal es la de rentar un pedazo de tierra para poder cosechar la fruta, debido a que la planta exige tierra nueva y fértil; un invernadero solucionaría esta problemática, pero al no tener los recursos suficientes, es imposible su edificación.
Las hermanas están al pendiente de la cosecha día y noche FOTO: Giovanna Martínez
“Si tuviéramos acceso a los recursos, podríamos hacer un invernadero y así cosechar fresa todo el año, quizá exportar y generar empleos para los habitantes de la comunidad; pero esto se ha quedado en un sueño”, dicen.
Les han tomado “el pelo”
A la familia se les ha esfumado las ganas de continuar en sus andanzas por las diferentes secretarías del gobierno estatal y federal, en busca de apoyos para el campo.
La mayoría las ha timado, pues recuerdan que en diferentes ocasiones han hecho trámites burocráticos y los apoyos nunca llegan.
Zoila recuerda que en una ocasión le organizaron una comida a Teófilo Manuel García Corpus, ex titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, quien se comprometió a llevar la ayuda, pero esta nunca llegó.
También, en algún momento solicitaron el apoyo para la adquisición de un tractor y les aseguraron que el gobernador Alejandro Murat había firmado para la entrega, pero la maquinaria nunca llegó.
Fresas con crema, paletas heladas, fermentado de fresa, entre otros productos, se comercializan GOTO: Giovanna Martínez
En fecha reciente, las convocaron para el apoyo de entrega de bultos de fertilizantes, les tomaron una foto institucional con tres de ellos, pero al momento de la entrega solo les dieron uno; “estuvimos desde las 7 de la mañana hasta las 5 de la tarde y solo nos entregaron un bulto, eso no nos alcanzó para nada”.
Dedicación
La fresa despide un aroma dulce y agradable; una de las hermanas, Beatriz Reyes, subraya que su producto es de muy buena calidad, ya que se han esforzado en tener las mejores plantas.
Para ayudarse económicamente elaboran productos derivados de la fresa, como un licor crema de fresa, fresas con crema, chocofresa y paletas heladas de fresa con chocolate. Además, hacen recipientes biodegradables para que las personas que gusten comprar sus fresas, se las lleven en canastas de carrizo.
Todos los domingos, la familia se reúne en el paraje "Las Fresas" ubicado en esta población, en un horario de 10:00 a 19:00 horas, en donde cuentan con un espacio recreativo donde las familias pueden convivir y disfrutar de la naturaleza; el único requisito es que se consuman los productos que elaboran las hermanas Reyes Calderón.
