Un total de 660 mil pesos por mes obtienen los dueños de los autobuses, por cada unidad, que en plenas calles del Centro Histórico como Guerrero, Fiallo, Hidalgo, Colón y Armenta y López mantienen sus lugares de ascenso y descenso del pasaje, en perjuicio de comerciantes y habitantes de la zona.
El costo de cada pasaje en los autobuses que van a la Ciudad de México es de 500 pesos por persona ida y vuelta; cada unidad puede trasladar a 44 pasajeros, entonces resulta que por cada viaje que realiza un camión obtienen 22 mil pesos, sin que paguen impuestos, estacionamiento y terminales. Este dinero multiplicado por los 30 días del mes, da un total de 660 mil pesos libres de polvo y paja.
Pasajeros, desprotegidos
El viaje en alguna de estas unidades no incluye seguro de vida, ni ninguna garantía para los pasajeros, por lo que representa un negocio redondo para cada una de las empresas, como la Pantera Rosa.
Al encabezar una protesta en el palacio municipal, para exigir que no se permita que el Centro Histórico de la ciudad capital se convierta en otra central camionera de segunda o tercera clase, la presidenta de la Alianza Empresarial y Comercial, Esther Merino Badiola, manifestó que no es posible que mientras los comerciantes del centro están cerrando sus negocios por bajas ventas, “los propietarios de estos camiones se estén enriqueciendo sin pagar absolutamente nada, ni contribuir a la hacienda pública estatal”.
Beneficio personal
Acompañada de comerciantes, vecinos y trabajadores del Centro Histórico, manifestó que ellos hacen esfuerzos para pagar sus impuestos y la continuación de operaciones, “por lo que no se vale que otros más vivos exploten para su beneficio personal las calles de la ciudad; ya tenemos en la vía pública una central camionera que no tiene permisos, ni paga absolutamente ninguna contribución, por lo que exigimos que sean retirados inmediatamente”.
Comentó que corresponde al gobierno del estado y federal tomar las medidas necesarias en este asunto, “sin que nosotros tengamos que venir al municipio para presionar a las autoridades a que actúen.
“Pero como no vemos que se intervenga, ahora venimos a exigir al Cabildo que ponga atención a esta problemática, porque no queremos que el próximo gobierno municipal continúe con esta situación, ya que nos genera graves daños a nuestra economía”.
Aumenta comercio informal
Merino Badiola aseveró que esta situación se agrava por el aumento del comercio informal y también la autorización de ferias que en nada benefician a la economía de la ciudad, toda vez que no generan empleos ni pagan impuestos, como la denominada expo feria de León, Guanajuato, donde son los mismos comerciantes informales quienes la organizan.
Subrayó que los nuevos transportistas no dejan dormir a los vecinos, ya que a las 4:00 horas inician sus actividades y permanecen en el lugar hasta altas horas de la noche, lo que además ha incrementado la inseguridad.
