Oaxaca.- Socorro Martínez López ha llorado por la muerte de dos de sus hijos (Juan y Armando Luis Martínez) y ahora de su nieto (Carlos Alberto Luis López), a quien en su momento dijo que "era una lacra" cuando sus seguidores destrozaron su taxi en el enfrentamiento de los sindicatos Libertad y Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC); pero también ha sufrido al ver en la cárcel a otro de sus hijos y un nieto.
La noche del viernes 1 de abril, al arribar al campo deportivo donde se celebraba uno de los partidos de futbol soccer del primer torneo del sindicato Libertad, Martínez López se dirigió a uno de los escoltas para recriminarle por haber fallado la seguridad.
Los policías investigadores indican que los escoltas estaban observando el juego, por lo cual los sicarios tuvieron tiempo de dispararle por la espalda al dirigente de transportistas del sindicato Libertad y cuando los escoltas reaccionaron y trataron de repeler la agresión, fue demasiado tarde.
Las primeras disputas de sus hijos
"Bronca entre hermanos y mamá de Juan Luis Martínez" tituló su nota el reportero Luis Ignacio Velásquez, tras presenciar la discusión de la familia frente a la unidad deportiva de la Universidad Autónoma "Benito Juàrez" de Oaxaca y describir la disputa que empezaba entre los hermanos de sangre.
La mañana del martes 13 de agosto del 2013 ocurrió un zafarrancho entre hermanos y sobrinos del extinto Juan Luis Martínez, que fue dirigente de la Confederación Nacional de la Productividad (CNP).
Hubo golpes, reproches, acusaciones y amenazas de muerte frente a doña Socorro.
Mayra y Guadalupe Luis Martínez fueron acusados de agredir a su hermano Armando y un sobrino.
"Diles quiénes te golpearon, diles, porque nosotros no estamos haciendo nada, no estamos provocando a nadie", incitaba Armando Luis Martínez a su sobrino ante el arribo de policías preventivos al lugar, minutos antes de las 11:00 horas.
Mientras otro de los trabajadores golpeados, Ezequiel Cortés López, reconocía que el conflicto se originó al decidir Armando formar el grupo Libertad, al margen de la CNP que lideraban Juan y Mayra Luis Martínez.
El grupo encabezado por Armando intentaba bloquear la obra del distribuidor vial, que supuestamente contrató su hermano Gilberto, por lo que se originó la disputa.
“¡Esto ya detonó, esto ya detonó, y todo por esos pinches chamacos, hijos de la chingada!, ¡Hasta dónde han llegado las cosas!", gritaba doña Socorro.
Gilberto Luis Martínez arribó al lugar, encaró a su hermano Armando y después "el problema quedó solucionado".
Sus nietos destruyen su taxi
A las 13:00 horas del 21 de abril del 2015, doña Socorro, exclamó: "Mis nietos son unas lacras", cuando los seguidores de Erick Geovanni Luis Martínez y Carlos Luis López destrozaron el taxi con número 589 del sitio 3 de Mayo de Santa Lucía del Camino y placas de circulación 7658-SJH del estado.
La mujer, frente a su unidad de motor desvalijada por los sujetos llevados por sus nietos para destrozar los taxis del sindicato de la CROC que dirige Mayra Luis Martínez, no podía ocular su coraje e insultaba y lanzaba injurias.
Las personas contratadas para destrozar los taxis se burlaban de las palabras de doña Socorro.
La concesionaria sufrió por la muerte de su hijo Armando Luis Martínez y ahora la pérdida de su nieto Carlos Alberto Luis López, al recriminar a los guardias por no haberlo protegido, como era su encomienda.
