Sentada en la sala de espera, previo a su cita médica, doña Rocio se queja de que hace una semana, cuando acudió por atención para su nieta de cinco años debido a la tos que presentaba, le fue imposible surtir su receta.
La mujer relata, con receta en mano, que el paracetamol y el ambroxol recetado en el Centro de Salud número 2 del Barrio de Xochimilco los tuvo que comprar, pues la alternativa para recibir el medicamento era acudir a la farmacia central del Seguro Popular, en la colonia Reforma, lo que represantaba gasto en transporte y tiempo.
Rocio, oriunda de la colonia Sabino Crespo, destacó que esta no es la primera ocasión en la que no recibe el medicamento recetado, pues de manera frecuente en la farmacia de ese centro de salud no encuentra el Captopril, que sirve para tratar su hipertensión.
Por su parte, el director de dicho centro de salud, Jaime García Santiago, señaló que el abasto de medicinas en esta unidad de atención se ha limitado en un 60 por ciento.
Esta situación genera que ante el repunte de la demanda para atender alguna enfermedad, generalmente por complicaciones en vías respiratorias, se agoten con rapidez los tratamientos.
Sin embargo, también destacó la inexistencia de insulina en la farmacia de este centro de salud desde hace tres o cuatro meses, lo que obliga a los pacientes que la requieren a acudir por la medicina a la farmacia del Seguro Popular o comprarla.
El doctor indicó que el cuadro básico de medicamentos en los centros de primer nivel, como el que dirige, cuentan con 139 claves distintas en medicinas, las cuales son analgésicos, antibióticos, antihistamínicos, antiinflamatorios, anestésicos.
Entre esos medicamentos destacan el paracetamol, naproxeno, diclofenaco, lidocaína y penicilinas. Además de otros destinados a la atención de enfermedades crónico degenerativos.
Detalló que las medicinas que no se encuentra en este tipo de centros de salud son las relacionadas a las especialidades, entre ellas para algún tipo de cáncer y transtornos convulsivos.
