Hace varios años, la hora de la comida familiar era intocable y para muchos el único momento para platicar con la familia. La televisión estaba apagada, y las conversaciones, aunque fueran aburridas, eran un acontecimiento.
En muchas ocasiones resulta frecuente ver en un restaurante a una familia pedir la comida con la nariz pegada en sus celulares. Allí están, en una salida para pasar tiempo juntos y cada integrante está metido en su mundo, asegurándose de no perder ningún chisme con amigos de las redes sociales. De alguna forma, los celulares en la mesa son quizás tan peligrosos como cuando se usan mientras se maneja.
Los celulares se crearon para establecer una mejor conexión con las personas; sin embargo, su mal uso ha ocasionado muchos problemas.
Muchos padres se quejan de que la vida se ha vuelto demasiado rápida y que no tienen suficiente tiempo para estar con sus hijos.
Sin embargo, en los momentos que pasan juntos, ellos están más conectados con el celular para comunicarse con otras personas y de igual manera los niños a sus tabletas u otros aparatos electrónicos. Con todo el entretenimiento digital posible, el teléfono se ha convertido en un medio de escape en cualquier situación.
Noé Torres Calvo, psicólogo con diplomados en psicología forense, diagnóstico y tratamiento del abuso sexual infantil, “Nace un criminal” la perspectiva desde el desarrollo psicológico; entrenamientos en psicoterapia familiar feminista, intervenciones terapéuticas en adolescentes difíciles y certificación internacional en terapia familiar breve basada en fortalezas colaborativas, explicó cómo ha influenciado y perjudicado el uso de los celulares en las familias.
“Actualmente se vive en tiempos que presta una atención extraordinaria a una serie de dispositivos que ayudan al intercambio de información y la comunicación entre las personas. El uso de los dispositivos móviles se ha vuelto un instrumento de acompañamiento de las actividades cotidianas, su impacto ha generado preocupación por la influencia que pueden ejercer estas tecnologías en el desarrollo y ajuste personal.
"Existe mayor interés por conocer no solo el uso que los niños y adolescentes hacen con sus dispositivos, sino también los factores de riesgo y la calidad de interacción entre padres e hijos,” mencionó el experto.
El psicólogo aclaró que no se trata eliminar el uso de la tecnología, sino de llegar a un punto donde se adecúe a la familia y no la familia a ella.
En ese sentido, el experto afirmó que la relación entre padres e hijos tiene una gran influencia en la mayoría de los aspectos del desarrollo, ya que cuando las habilidades y comportamientos de crianza son óptimos, estas tienen un efecto positivo en la autoestima de los niños, niñas y adolescentes, en el rendimiento escolar, en su desarrollo cognitivo y comportamiento.
TOMA NOTA
*Es importante que los padres demuestren afecto hacia sus hijos.
*En la familia se deben desarrollar hábitos por la lectura de libros.
*El ejemplo es fundamental.
*Desarrollar actividades físicas como el ejercicio y juegos familiares.
*Los padres deben de poner atención y conocer los intereses, motivaciones de sus hijos y para que los ayuden a desarrollarlas.
*El juego constituye un elemento básico en la vida de las niñas, niños y adolescentes, que además de divertido resulta necesario para su desarrollo, por lo que necesitan estar activos para crecer y desarrollar sus capacidades.
*Apagar los celulares, las computadoras y los dispositivos personales sería el primer paso para reafirmar la importancia de la familia y la garantía de que a los hijos no se les olvide la trascendencia del tiempo que pasan juntos a sus familiares o amigos.
