“Vivir en el cinturón de fuego, una zona donde las placas tectónicas están en permanente fricción y en consecuencia generan fuertes temblores, representa por sí mismo un riesgo inminente y la población debe saber que la posibilidad de colapso de las viviendas tradicionales, de adobe, son muy elevadas e, incluso, de las construcciones de concreto reforzado con mampostería”, afirma el ingeniero José Alberto Marcial Sánchez.
Con estudios de posgrado, vasta experiencia en la construcción y estudioso del tema sísmico, Marcial Sánchez, en entrevista con NOTICIAS, da su opinión y algunas recomendaciones a considerar en una zona donde casi nunca deja de temblar.
NOTICIAS-¿Cuál es la causa principal de la actividad sísmica en el estado?
AMS-De acuerdo con la Teoría de la Tectónica de Placas, el estado de Oaxaca se encuentra ubicado sobre una zona de subducción.
Debajo de nosotros y desde la parte más profunda del borde continental, por el Océano Pacífico, la Placa Continental se introduce de manera constante, en varios centímetros por año, la Placa de Cocos, generando fricción y acumulando tensión en su desplazamiento.
Cuando esa tensión se destraba repentinamente debido a la fractura de la roca sólida en la litósfera, ocurre una gran liberación de energía en forma de vibraciones que llega a la superficie originando sismos y sacudiendo al macizo o terreno continental.
N- ¿Por qué algunos temblores de la misma magnitud hacen más daño que otros?
AMS- Todo depende del punto de la ruptura de la falla, o lo que se llama epicentro.
La cercanía y la profundidad del epicentro son factores claves en la aceleración del suelo y la intensidad de los sismos.
Historias de heroísmo han sido contadas una y otra vez. FOTO: AFP
Si estamos cerca de un foco somero de una profundidad menor a los 70 kilómetros, la aceleración del suelo es mayor y suele causar daños más grandes al dar un efecto de trepidación al suelo.
A medida que las ondas superficiales, que son finalmente las que causan los movimientos telúricos se alejan más del epicentro, se hacen más largas, dando un efecto más suave de oscilación, y originando pocos daños.
N -Hoy en día, con los avances tecnológicos ¿es posible predecir los sismos?
AMS- Los sismos forman parte de los fenómenos aleatorios de la naturaleza, por lo que es imposible, hasta el día de hoy, predecir la fecha, el lugar y la intensidad con la que ocurrirán.
N- Hemos visto que las edificaciones tradicionales de adobe y mampostería son las que representan mayor riesgo, ¿son más seguras las construcciones de concreto?
AMS- Si están bien calculadas y correctamente construidas, desde luego podrían ser más seguras, pero aun así, existen algunos factores que no debemos soslayar: fallas que manifiestan señales patológicas en los inmuebles, como son la corrosión en vigas, columnas y losas; fisuras y grietas que ponen en riesgo la seguridad estructural del inmueble; la edad de las construcciones, pues el concreto armado, ojo, tiene normalmente una vida útil de 50 años.
Cuando el concreto envejece pierde ductilidad, sufre deformaciones importantes y daños excesivos cuando es sometido a la aceleración instantánea del suelo producida por los sismos, y recordemos que en Oaxaca los sismos están a la orden del día.
N-¿Cuál es su opinión de los sistemas constructivos utilizados en la actualidad en la ciudad de Oaxaca?
AMS- Sólo en los últimos años se ha empezado a utilizar el acero en la construcción de edificios públicos y privados en la ciudad de Oaxaca, lo cual es definitivamente evolución y una garantía de seguridad.
Los edificios de acero son muy ligeros y bien diseñados, y soportan sin fatiga los esfuerzos por sismo.
Miles salieron a las calles para ayudar. FOTO: AFP
“Sin embargo, también seguimos viendo construcciones muy pesadas, estructuralmente seguras, pero en las que no se consideraron en su diseño los fenómenos sísmicos como la licuefacción del suelo, donde debido a la acción de una carga sísmica, el suelo pasa de estado sólido a estado líquido, causando el colapso de las construcciones. Esta condición puede ser especialmente susceptible en el centro de la ciudad y en las zonas bajas como San José La Noria, Trinidad de las Huertas y Candiani -donde había muchos cultivos y eran zonas muy húmedas- entre otros. También son muy susceptibles las zonas donde el manto freático se encuentra a muy pocos metros de la superficie y se presentan estratos de arenas y sedimentos".
N- ¿Alguna recomendación final?
AMS- Hay que insistir ante las autoridades estatales y municipales para que agilicen los trámites y reduzcan los costos para sacar una licencia de construcción y que ofrezcan asesoría a las personas de bajos recursos.
A las cámaras empresariales del ramo y a los colegios de ingenieros, sería recomendable que ofrezcan apoyo obligado y supervisión gratuita a las personas en pobreza para poder construir sus domicilios con las condiciones más idóneas que impidan, en la medida de lo posible, su desplome en caso de un gran sismo.
Y a la ciudadanía se le recomendaría tomar conciencia e investigar más sobre el fenómeno y no la sorprendan.
