Durante 9 años un grupo de 15 mujeres han sembrado sus esperanzas en el nopal y la sábila, pero lograr producir cremas o shampoo, no fue fácil. Ninguna conocía el proceso de transformación.
Araceli Flor Hernández García, presidenta de la Cooperativa Progreso y Dignidad de la Mujer, recuerda que la primera vez que lo intentaron lo único que obtuvieron fue agua.
Tuvieron que pasar 15 intentos fallidos para lograr desarrollar la primera variedad de shampoo a base de plantas y otros siete ingredientes para conseguir una crema hidratante.
Venta a granel
En municipios como Magdalena Etla, Ejutla de Crespo y las agencias de Trinidad de Viguera y Pueblo Nuevo del municipio de Oaxaca, el grupo de mujeres ya sembraba nopal para beneficiarse de la venta de grana cochinilla, pero su producción era limitada.
Por cada kilo de nopal lo máximo que podían recibir eran 15 pesos y ahora que lo transforman en productos de cosmetología “tenemos un valor agregado”, y se convirtieron en la primera pequeña empresa de este tipo en Oaxaca que emplea a mujeres.
“Entre todas teníamos tres mil pencas de grana, pero nos pedían producción por toneladas y no teníamos suficiente para surtir”, recuerda con decepción Araceli Flor.
Investigar en internet les llevó a descubrir que en España habían desarrollado un shampoo a base de esa planta. El paso siguiente fue contratar la asesoría de un ingeniero química “para entender los usos del nopal”.
Lograrlo les implicó tiempo e inversión. Primero gestionaron un proyecto en lo que fue la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) para la siembra de nopal.
“Tenìamos lo principal”, Entre 2012 y 2013 acumularon intentos fallidos, hasta que un día comprobaron que el shampoo quitaba impurezas en el cabello y que la crema tenía textura.
“Las primeras pruebas al aplicarla en la piel parecía que se untaba uno agua. No quitaba manchas. No estaba lista”, reconoce la presidenta de la cooperativa.
Le agregan valor
Una vez con el producto listo, “pagamos el registro de la marca que costó dos mil pesos”, otros cinco mil pesos lo invirtieron en el diseño de las etiquetas.
Ahora tienen 12 productos: shampoo a base de plantas, pero cuyo principal ingrediente el el mucílago de nopal; cremas en cuatro presentaciones (de caléndula, nopal y sábila); repelente de mosquitos; gel para los dolores musculares; jabones; enjuague bucal en spray; pomada para labios y de tepezcohuite.
El inicio fue muy díficil. Los 10 litros que lograban producir se convertían en muestras que regalaban en oficinas de gobierno para que empezaran a creen en el producto del que ahora producen 30 botes individuales al mes, porque la limitante actual es su comercialización.
