BEIRUT, Líbano (AP) — La frágil tregua en Siria comenzaba a desmoronarse el domingo debido a los primeros ataques aéreos lanzados contra zonas bajo control rebelde en Aleppo y una aldea en el sur, acciones que dejaron al menos ocho personas muertas.
Estas violaciones ocurren en medio de un agravamiento de las tensiones entre los impulsores del cese del fuego, la Casa Blanca y el Kremlin, a causa de la mortífera incursión que aviones de Estados Unidos efectuaron contra fuerzas del gobierno sirio.
El ataque aéreo lanzado por la coalición que encabeza Washington dejó decenas de soldados sirios muertos y propició severas críticas de Damasco y Moscú al gobierno estadounidense.
Las fuerzas militares de Estados Unidos afirmaron que quizá atacaron por equivocación a efectivos sirios cuando efectuaban el sábado una misión aérea contra el grupo Estado Islámico en el este de Siria.
Se supone que la tregua de siete días concluiría a la medianoche del domingo, según señaló el ejército sirio en un comunicado emitido la semana pasada.
Estados Unidos y Rusia habían dicho que si el cese del fuego duraba siete días, procederían a establecer un Centro de Implementación Conjunta para coordinar sus ataques contra el Estado Islámico y otros grupos vinculados con Al Qaeda.
A pesar de que el cese en las hostilidades ha sido respetado en general, las partes en conflicto lo han violado reiteradamente, y las caravanas de asistencia no han llegado a los sectores sitiados en poder de los rebeldes en Aleppo, epicentro de la violencia en los últimos meses en el país.
Ésta es la segunda ciudad más grande del país y alguna vez fue su centro para el comercio. El envío de asistencia a la urbe forma parte del acuerdo del cese del fuego que concertaron Estados Unidos y Rusia.
A principios de mes, las fuerzas del gobierno sirio y sus aliados capturaron zonas que habían perdido al sur de la ciudad y reactivaron el sitio contra los vecindarios del este en poder de la oposición.
Más de 2 mil personas han fallecido en 40 días de lucha en la ciudad, incluidos 700 civiles, entre ellos 160 niños, según un grupo activista sirio.
La televisión estatal siria informó el domingo que decenas de habitantes han abandonado las zonas en poder de la insurgencia en Aleppo y fueron llevados a albergues ubicados en la parte de la ciudad que controla el gobierno.
Por su parte, el gobernador de Aleppo, Hussein Diab, exhortó el domingo a los insurgentes que controlan los sectores orientales de la ciudad a que se rindan, entreguen sus armas y aprovechen la amnistía decretada recientemente por el presidente Bashar Assad.
2 mil personas o más han fallecido en 40 días de lucha en la ciudad
700 civiles, entre ellos 160 niños, se cuentan entre las víctimas
