El café no es un cultivo originario de México; fue en el siglo 18 que los inmigrantes franceses trajeron consigo la semilla del café y establecieron los primeros cultivos.
Debido a la naturaleza de la planta, los lugares elegidos fueron los de climas tropicales y de amplia vegetación, como lo son Veracruz, Chiapas y Oaxaca.
Rápidamente, el café en México se convirtió en uno de sus principales productos agronómicos de exportación. La variedad que más se produce en México es arábica.
¡Excelente jueves!