Establecida como zona económica especial, la demanda de agua para el Istmo de Tehuantepec crecerá en más de un 50 por ciento.
La Comisión Nacional del Agua, señaló que el aforo necesario para satisfacer la demanda de la población así como de las empresas que se asienten en el lugar será de 31 millones de metros cúbicos, equivalente a un metro cúbico por segundo (mil litros por segundo).
El delegado de la Conagua, Miguel Calderón Arámbula explicó que, a pesar de que en apariencia el Istmo tiene agua suficiente para su desarrollo, el vital líquido ésta no está en los lugares adecuados. "Tenemos que acercarla a las ciudades y potabilizarla para hacerla de buena calidad", declaró.
"Tenemos agua para satisfacer la demanda actual pero hay que pensar en el desarrollo explosivo que tendrá esta zona a raíz del decreto de zona económica especial", expuso.
En el estudio realizado por la Conagua se establece que dicho aforo será suficiente para 462 mil habitantes de 19 municipios del Istmo que requieren agua para su uso diario doméstico así también para el desarrollo industrial, turístico y comercial.
El proyecto Agua futura delineado por la Conagua abarca cinco años de inversión, el cual podría iniciarse a partir de 2017 con recursos que conjugan presupuestos de los ayuntamientos y dependencias del gobierno federal aproximados a los 10 mil 500 millones de pesos, dijo el funcionario federal.
Agua futura fue delineado en 2015 y trata de abordar todas las aristas del agua desde garantizar el suministro, agua de calidad para el desarrollo industrial, turístico y comercio, así como garantizar que las zonas que se desarrollan con la industria estén libres de inundaciones.
"Los programas más importantes son los que consideran aquellas zonas de desarrollo, específicamente las zonas económicas especiales entre ellas el Istmo de Tehuantepec. Esto nos está instruyendo a buscar los mecanismos para satisfacer las necesidades de las zonas económicas especiales", expuso.
A la par -agregó- se tiene que pensar en el saneamiento y en la infraestructura necesaria para que las aguas sean saneadas además de reutilizarlas para mantener los caudales de los propios ríos o para los procesos de las empresas.
El proyecto incorpora a la Cuenca en el uso y conservación de los bosques con una serie de beneficios para esta zona de Oaxaca.
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31 millones de metros cúbicos para satisfacer la demanda
