Hace 23 años José compró una vivienda en la Quinta. Etapa del Fraccionamiento El Rosario. Se había casado y estaba dispuesto a formar una familia con su esposa Rosa.
Como es común en muchas colonias, los vecinos se organizaron para formar comités y mantener una sana convivencia. Pero todo eso quedó atrás apenas hace unos días: la tranquilidad de José y otros vecinos fue interrumpida cuando sus vecinos empezaron a coartar el libre tránsito y estacionamiento.
Él, junto con otros habitantes han iniciado una queja ante la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) y ante el municipio de San Sebastián Tutla. El objetiv: que se deje de privatizar espacios para el estacionamiento público.
La queja
NOTICIAS, Voz e Imagen de Oaxaca acudió al andador Circuito Río Tomellín, ubicado entre la calle Salina Cruz y Juchatengo, en la Quinta Etapa de dicho fraccionamiento.
Al llegar a dicha zona, se observan varios objetos que impiden el libre estacionamiento sobre la calle de Juchatengo, botes, rines, cadenas, objetos de metal, ladrillos, entre otros.
El andador Río Tomellín se encuentra cerrado, se colocó una reja para impedir el acceso de vehículos. FOTO: Eric Díaz
Ingresar a la calle Río Tomellín es imposible con vehículo, pues una estructura de metal impide el paso. Rosa asegura que hace unas semanas el comité cambió el candado y las llaves de la entrada principal, cuando solicitó las mismas, se las negaron bajo el argumento que tenía una deudo con los el comité de vecinos desde hace un año.
Rosa, junto con su esposo, trabajan de noche, su horario les hace imposible asistir a los tequios, pero por más de 20 años han cooperado con el comité vecinal, hasta hace un año que decidieron no hacerlo por la falta de justificación de los recursos.
La molestia de José fue cuando los vecinos se apropiaron un espacio de estacionamiento, el cual fue "privatizado" con una cadena. “El libre tránsito por el espacio público se encuentra restringido a sólo un grupo de personas, ingresar se ha convertido en un lujo privado”.
Recuerda que hace algunos años los ciudadanos gestionaron la ampliación del estacionamiento, ocupando para ello un espacio que anteriormente se usaba como jardín común; las autoridades avalaron dicha ampliación y se realizaron los trabajos. Pero más tarde ese espacio también se privatizó a favor de unos cuantos.
Cobros excesivos
Flor es una vecina que asegura hace algún tiempo se acercó al comité para solicitar que la dejaran ingresar y estacionar su vehículo, la respuesta fue que tendría que pagar una suma de mil 200 para contar con un cajón.
Las advertencias a los visitantes. FOTO: Eric Díaz
“Cuestioné si era seguro que me lo dieran y dijeron que 'tal vez'; eso me hizo dudar y ya no les di dinero, debido a ello tengo mi coche afuera del estacionamiento, pero es muy difícil estacionarse porque los lugares tienen objetos que lo impiden”.
Ante el difícil acceso a esa calle, servicios como el gas y el agua purificada ya no ingresan, ya que en algunas ocasiones les han cerrado la puerta. “la última vez que pedí el gas, el señor me dijo que no podía llevarlo a mi casa y que no entraría para no quedarse encerrado”, afirma Flor.
Conflicto
El conflicto entre vecinos se agudizó ante las agresiones verbales para con personas que hacen uso de espacios de estacionamiento, “hay vecinos que no tienen automóvil, pero se apropian de espacios frente a su domicilio, ningún vehículo se estaciona y si lo hacen son incluso dañados”, comenta José.
Son al menos 15 vecinos inconformes con la privatización de la calle y el lugar de estacionamiento; aunado a esto, el comité ha establecido cuotas de “cooperación voluntaria”, de mantenimiento, reglas, sanciones y multas.
Se hicieron las gestiones para ampliar el espacio al tomar un jardín y ahora es estacionamiento para unos cuantos. FOTO: Eric Díaz
“Solicitamos comprobantes de pago por las tarifas para utilizar el estacionamiento y se nos fueron negadas, no ha existido jamás una transparencia detallada del dinero que los vecinos han aportado en años”, exclama José.
La contraparte
La tesorera, en representación del comité, indicó que el actuar de los demás vecinos está justificado, ya que se está dando cumplimiento al reglamento interno. “Solo tenemos a un vecino inconforme”.
Comentó que los primeros domingos de cada mes realizan tequio a las diferentes áreas comunes y se reúnen para tomar acuerdos. Agregó que debido a la delincuencia han colocado alarmas, alumbrado y hasta cámaras de seguridad, todo ha sido pagado con el recurso solicitado a los vecinos.
“Cada mes se coopera con diez pesos por vecino para los diferentes gastos que se tienen”, dijo.
Afirmó que la colocación de un candado y cadena se debe a que vecinos que no pertenecen a las manzanas 61,66,69 y 70 llegaron a estacionarse, ocupando espacios y dejando fuera a los vecinos.
Esta misma práctica de privatizar las calles, ha sido retomada por otros vecinos de la zona.
La tesorera asegura que ningún espacio está privatizado, que las medidas que se han tomado es por el aumento de la delincuencia. Asegura que será las autoridades del municipio quienes deberán intervenir en este conflicto para garantizar la sana convivencia.
