La negociación salarial con el Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (STEUABJO) se lleva a cabo en un nuevo contexto, porque a partir de la crisis en la institución fue necesario suscribir un convenio con la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el gobierno del estado para atender los problemas estructurales de la institución, así como contener los salarios y prestaciones laborales de los trabajadores, “por eso pedimos a los sindicalizados sensatez y sensibilidad para cuidar la fuente de trabajo”, señala el rector Doctor Eduardo Bautista Martínez.
Subraya que el convenio implica la reestructuración administrativa de la universidad y la responsabilidad de la propia rectoría, porque después de recibir 51 millones de pesos para pago de sueldos de diciembre y aguinaldos de 2018, la SEP advirtió que no habrá más rescates financieros. “Que esta era única ocasión que se consideraban”.
Explica que el saneamiento se resumen en dos criterios: atención a problemas estructurales que la UABJO ha ido acumulando como de reconocimiento de plantilla laboral, problemas por el peso de prestaciones no reconocidas, y el costo del sistema de pensiones y jubilaciones.
“En nuestro caso se trata de una universidad centenaria en donde la mayoría de los trabajadores está llegando al momento de su jubilación, de tal manera que si diéramos entrada a la cantidad de aspirantes de jubilaciones nuestra nómina llegaría al 50 por ciento de jubilados; además por cada jubilado hay que contratar a otro trabajador y de esta forma se aumenta el monto de las plantillas no reconocidas”.
Dice que el otro criterio es una política de contención, es decir no hacer contrataciones de nuevo personal académico o administrativo si no existe en presupuesto financiero para ello, “pero nadie va a ser despedido, el compromiso es la no contratación de nuevo personal; las prestaciones laborales también van a contenerse para todos los sindicatos”.
En su oficina de la torre de rectoría, añade que es necesario hacer ajustes de fondo porque no se puede aumentar el salario más allá del tope establecido a nivel federal en este emplazamiento de incremento salarial, para que en septiembre u octubre estén recurriendo nuevamente a la federación porque el recurso no alcanza.
Manifiesta además que el convenio impone también responsabilidad de transparencia y rendición de cuentas a toda la universidad. “Que bueno que lo impulsa el gobierno federal para que no haya suspicacias de cómo se administra el recurso; cuando inició mi administración estábamos en cero en el cumplimiento de las obligaciones de transparencia, hoy estamos al 52 por ciento, desde luego que falta mucho por hacer pero esto lo debemos construir entre todos; la nómina ya está en el portal de transparencia para ir eliminando especulaciones”.
Bautista Martínez comenta que la revisión salarial que se lleva a cabo con el STEUABJO ya no se da en las condiciones de hace 20 o 30 años, “para empezar ya no pueden llevarse a cabo en lo oscurito, tenemos que dejar la opacidad de lado y si tenemos la buena voluntad del presidente Andrés Manuel López Obrador de insistir en su lucha contra la opacidad, debemos ser consecuentes con ello”.
Expresa que la huelga prevista para el primer minuto del viernes 1 de febrero del año en curso podría conjurarse porque el incremento salarial no puede rebasar el tope establecido por el gobierno federal y, además, porque en la revisión de las presuntas violaciones al contrato colectivo de trabajo hay que tomar en cuenta qué tiene autorizado aprobar la universidad y qué no, sobre todo a partir de la firma del convenio suscrito con la SEP y el gobierno estatal, “ya que si pago algo que no tengo autorizado quedo implicado en un asunto de desviación de recursos”.
“No puedo dejar de señalar que muchas de las prestaciones contenidas en los contratos colectivos de trabajo son producto de un crecimiento desordenado que tuvo la universidad y que en muchos momentos de su historia respondió a negociaciones de carácter político, pero si queremos restablecer la vida institucional tenemos que ser consecuentes con el cumplimienrto del trabajo académico y administrativo”.
-¿En este contexto cómo prevé el emplazamiento a huelga, habrá suspensión de actividades o no?
-No es una situación sencilla, nos hemos dado a la tarea de sensibilizar a los trabajadores sobre la situación que vive la universidad, por eso apelo a la sensatez y a la sensibilidad de los sindicalizados. A los dirigentes solicito que transmitan a sus compañeros con mucha claridad los términos del convenio y los avances que se llevan en las mesas de negociación porque en la medida que estén informados pueden, incluso, estar en un situación mucho más prudente respecto a las decisiones que habrán de tomar.
