Sobre la primera calle de García Vigil, en el centro de la capital oaxaqueña, importante vía que desemboca en la Alameda de León, la banqueta desapareció hace varios meses; tantos, que su presencia ya es parte del recuerdo que revive con cada tropezón y caída de los peatones.
El paso peatonal sólo conserva el borde de protección que los delimita del arroyo vehicular. El andar se hace accidentado entre las piedras de un suelo disparejo que de ninguna manera puede ser utilizado por personas en sillas de ruedas, muletas o incluso adultas mayores.
Para saber:
El Centro Histórico de Oaxaca fue declarado por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad debido a la belleza arquitectónica que lo conforma.
El corazón de Oaxaca tiene un trazo perfecto y construcciones históricas de gran belleza. EL diseño de sus calles es similar a un tablero de ajedrez y fue concebido en 1529 por Alonso García Bravo, quien también fue el autor del antiguo trazo urbano de la ciudad de Veracruz y de México.
Entre tropezones
La gente que por aquí pasa, inevitablemente tropieza con alguna piedra, la tapa del registro de teléfono o coladera. La calle es altamente transitada, ya que sobre ésta se encuentran tres bancos, tres restaurantes, una tienda de autoservicio, una peluquería, una tienda de zapatos y otra de ropa, así como el acceso a una vivienda.
“Fue a principios de año que empezaron a quitar toda la cantera. Eso nos afectó porque fue mucho tiempo con polvo. De ahí optamos por poner unos banquitos para el acceso al restaurante. Hasta el momento vemos que no tienen para cuándo la conclusión de la banqueta”, señala un empleado del restaurante.
El paso peatonal está completamente accidentado: tapas de registros, tubería y hoyos son los obstáculos que hay que esquivar. FOTO: Román Carlos
Además del polvo que ocasionó en su momento, la falta de conclusión de la obra provocó la presencia de roedores en el lugar, pues dejaron abiertos hoyos que conectan con el drenaje. “Si se da cuenta, hay un chorro de hoyos y de ese hoyito salen un chorro de ratones. Ya lo tapamos varios veces, pero no sé cómo le hacen que vuelven a abrir y luego se saltan para acá”, indica.
Aunque la calle quedó abierta desde hace tiempo, otras obras de mejoramiento de banquetas se iniciaron sin haber concluido la de García Vigil, la cual forma parte del proyecto integral del andador semipeatonal que baja desde la Cruz de Piedra.
Las obras iniciaron en el 2014 durante el trienio anterior. El proyecto del andador estaba planeado para llegar hasta la Alameda de León, sobre la calle de Independencia. El remozamiento se quedó hasta el cruce con Morelos, una cuadra antes.
Con las lluvias, el lugar queda encharcado; el paso del peatón se reduce aún más. FOTO: Román Carlos
La segunda etapa del andador semipeatonal, sobre la calle García Vigil, dio inicio en abril del 2016 desde la bocacalle de Manuel Bravo. Su duración sería de seis meses. En su momento, la entonces directora del Centro Histórico y Patrimonio Edificado, Verónica Arredondo, señaló que el atraso se debió al cierre de carreteras que realizó la Sección 22 del SNTE en junio del año pasado.
Sin fecha de conclusión
Según su justificación, el material para la construcción no llegó a tiempo; sin embargo, existía el compromiso de que el proyecto se concluiría antes de culminar la administración anterior, situación que no ocurrió así.
Ahora, el actual gobierno municipal está enfocado en trabajos de remozamiento de banquetas en la calle de Hidalgo.
“Esta calle está peligrosa porque a veces va uno caminando y con tanto hoyo nos tropezamos. El gobierno, en lugar de solucionar los problemas en la ciudad, se dedica a hacer otras cosas, a atender a las organizaciones y no al pueblo que lo merece. Para esto había recursos, pero ¿para dónde van, qué destino llevan?”, señaló un peatón.
La primera etapa del andador semipeatonal tuvo un costo de 15 millones de pesos, en tanto la segunda alcanzó los 30 millones de pesos, con aportaciones provenientes del gobierno federal a través del Fondo Nacional para las Culturas y Artes (Fonca), el gobierno del estado y el municipal.
La banqueta de García Vigil desapareció hace más de medio año. FOTO: Román Carlos
De acuerdo con los locatarios de la zona, hasta el momento no han sido informados del reinicio de los trabajos o si éstos se retomarán o no.
Más calles destrozadas
García Vigil no es la única calle destrozada en el primer cuadro de la ciudad. Sobre la vialidad de Doctor Pardo a su cruce con Armenta y López, las lajas de cantera quedaron trituradas por el peso vehicular. La afectación en la carpeta vial ha sido motivo de accidentes, ya que al transitar por la zona, los motociclistas llegan a perder el equilibrio.
La calle está destrozada desde hace más de medio año, afirman comerciantes de la zona, quienes han sido testigos de múltiples accidentes.
El lugar es transitado por estudiantes del Centro de Educación Artística Miguel Cabrera (Cedart), así como por personas que se dirigen hacia la Cruz Roja o a la Fiscalía Especializada de Atención de Delitos por Razón de Género.
En la calle de Doctor Pardo sólo quedaron las marcas de las lajas. FOTO: Román Carlos
