La falta de rastros con tecnología de vanguardia para garantizar productos cárnicos de altos estándares higiénicos sanitarios, convierte a Oaxaca en un "foco rojo", reconoció Eduardo Rojas Zavaleta, Secretario de Desarrollo Agropecuario, Pesca y Acuacultura del gobierno estatal (Sedapa).
Explicó que un litro de sangre de animales sacrificados para consumo humano en rastros clandestinos, puede contaminar hasta 300 mil litros de agua. "Estamos hablando de un grave problema de salud pública", reconoció el funcionario.
Por ello, el compromiso del gobernador Alejandro Murat, quien en próximos días pondrá en marcha la construcción de dos rastros TIF ( Tipo Inspección Federal) que representan en conjunto una inversión de 50 millones de pesos, confirmó.
Adelantó que un complejo sería construidos en el Istmo, concretamente en Ciudad Ixtepec, mientras que otro en la Costa, y la sede podría ser Río Grande o Pinotepa Nacional.
Para la validación de esos proyectos contaríamos en próximos días con la presencia de Francisco José Gurría Treviño, Coordinador General de Ganadería de la Secretaría de. Agricultura, Ganadería , Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación.(Sagarpa).
Tres rastros en Oaxaca
Hizo notar que después del rastro TIF que inauguró recientemente el gobernador Murat Hinojosa en San Juan Bautista Tuxtepec, con el de la Costa y el Istmo, sumarían tres los complejos que permitirán a los ganaderos dar valor agregado a su producto.
Explicó que por cada rastro se invertirían 25 millones de pesos. La federación aportaría siete millones y medio de pesos, y la parte restante seria aportación del Gobierno estatal y las uniones de ganaderos.
El titular de la Sedapa, ilustró que el Sistema TIF se estableció formalmente en 1947 a raíz de la fiebre aftosa en México, pero la industria empacadora de nuestro país se integró al Sistema hasta 1954.
Eduardo Rojas Zavaleta explicó que la Certificación TIF, es otorgada por la Sagarpa, a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
