De acuerdo con un comunicado oficial del Senado de la República, la semana pasada se aprobó una iniciativa propuesta por la senadora Susana Harp.
Dicha iniciativa surgió, según señaló Harp, debido a que existe una “laguna jurídica” que facilita que personas ajenas a las comunidades indígenas y afromexicanas se apropien de las expresiones culturales de dichos grupos sin hacer ninguna retribución a cambio.
Entre los objetos protegidos se contemplan artesanías y prendas típicas así como el patrimonio intelectual –tradiciones, prácticas, etcétera–.