Los retos del gobierno de la Cuarta Transformación son muy grandes, porque entre otros temas el país debe recuperar su soberanía, la ética del trabajo, las lógicas democráticas, tiene que haber democracia sindical, democracia electoral efectiva, pues México está hundido, contra lo que dicen los señores del poder, ha sido saqueado sistemáticamente y entonces los retos, son los retos de una reconstrucción, afirmó el caricaturista, pintor, escritor y activista político de izquierda, Rafael Barajas Durán, El Fisgón.
Después de ofrecer una conferencia sobre la historia de la Intervención Francesa, en el ex convento de Santo Domingo de Guzmán con motivo de la exposición Noticias del Imperio, señaló que sin embargo si la sociedad no participa va a ser imposible lograr la Cuarta Transformación del país.
“Lo que yo creo es que la sociedad tiene que participar y la otra cosa que creo, es que la sociedad quiere participar; lo que he visto es que en todas partes hay una gran ansia de trabajar y una gran ansia de salir adelante; lo que sí puedo decir es que la gran mayoría de mexicanos estamos convencidos de que este estado de cosas ya no es aceptable”.
-¿Cómo se combatirá la violencia?
-Obviamente uno de los problemas es que el país está sumergido en las lógicas de violencia y lo que yo creo que se tiene que hacer es cambiar, entre otras cosas, los paradigmas que nos han regido en términos de combate a la delincuencia; nos hemos regido por las lógicas del populismo penal y tenemos que cambiar totalmente este modelo; yo creo que, entre otras cosas, hay que despenalizar las drogas, que hay que atacar las causas de la delincuencia, que es necesario cambiar la economía de la Nación y las lógicas dominantes de lo que son los modelos de negocios, porque de pronto aquí son aceptables los modelos de negocios delincuenciales ¿no? No es poca cosa.
-¿Hay en este momento hombre capaces de impulsar la Cuarta Transformación?
-Yo creo que los hay y si no los hay los tenemos que preparar, haber de dónde los sacamos. Tampoco había muchos en tiempos de los liberales, estas gentes surgen con la adversidad; lo que pasa es que los tenemos que cuidar y sacar adelante.
-¿Alcanzan seis años?
-Yo creo que no, ya que han transformado al país a lo largo de 37 años del proyecto neoliberal, cambiar esto va a ser tardado; lo que yo sí creo es que sí se pueden hacer muchas cosas en seis años y espero que el proceso de transformación sea más largo que seis años.
-¿Y si no alcanzan seis años qué hay que hacer?
-Pues hay otros sexenios ¿No? Jajajajajajaja...
"El humor nos salva del horror"
El codirector de las revistas el Chahuistle y El Chamuco sostuvo que el humor del pueblo mexicano no ha cambiado con el paso del tiempo, porque es toda una cultura que se ha ido construyendo con el tiempo. “Tenemos una cultura de humor muy específica, es uno que podemos llamar negro, mexicano, bastante terrible, y esta cultura del humor la vamos a seguir cultivando, es parte de lo que nos salva del horror”.
-¿Cuál es el papel de la caricatura en este momento político?
-Bueno, vivimos en una sociedad de imágenes que exige velocidad, entonces si una caricatura puede sintetizar un problema político, pues la gente va a leer más fácilmente una caricatura que un artículo sesudo y bien planteado; es decir, la gente lee más fácilmente una mala caricatura que un buen artículo.
Dijo estar convencido de que la Internet es un derecho humano, de que es importante de que todo mundo tenga acceso a la información, “es uno el universo de la gente que tiene Internet y otro el de la gente que no lo tienen, las posibilidades y las potencialidades son muy distintas, entonces a mí sí me parece importante que se impulse la Internet en todo el país.
“En el triunfo de Andrés Manuel López Obrador no solamente fueron importantes las redes sociales, lo que fue también muy importante es que se cayeron de hecho los medios convencionales, ya muy poco gente se entera a través de los noticieros de Televisa, muy poca gente ve los noticieros de TV Azteca, y todo esto tuvo que ver”.
-¿Cuál será la relación con los medios de comunicación en el nuevo gobierno?
-No lo sé, pero sí creo que tenemos que centrarnos en una prensa que sí le sirva a la sociedad y no tanto a los señores del dinero, mucho menos a los funcionarios que sueltan dinero a loco, eso no puede ser, esa no es la voz de la sociedad. Entonces esto tiene que cambiar y mucho va a depender de lo que vaya a hacer la sociedad.
Rafael Barajas, liberal por convicción
El viejo convento de Santo Domingo de Guzmán sirvió al Fisgón, cuyo nombre de pila es Rafael Barajas Durán, para presentar una caricatura, seria, documentada y libre, -como debe ser toda caricatura-, de un episodio fundamental en la historia de México: la Intervención Francesa.
De la lucha que libraron conservadores y liberales desde prácticamente el fin de la Guerra de Independencia hasta la llegada a la presidencia de la República del indio de Guelatao, Benito Juárez García.
Un guerra política, pero también cotidiana, doméstica, familiar, donde su tía tomaba partido cada vez que las necesidades fisiológicas la requerían, con una frase lapidaria: voy a ver a Juárez.
El pretexto de la charla fue la presentación de estampas y caricaturas de la Intervención Francesa recopiladas por el escritor Carlos Monsiváis, que se exhiben en el ex convento en el marco de los 20 años de la restauración del majestuoso inmueble.
Ni mochos ni conservadores
Fiel a la tradición de su arte, el Fisgón agregó elementos humorísticos a los hechos consignados en la historia, pero sobre todo desacralizó algunas de las versiones oficiales: los liberales no eran mochos, quizás eran muchos, pero hasta Juárez confió la educación de su hijo a un sacerdote; así como Maximiliano no era tan conservador, pues tenía como modelo las sociedades liberales de Europa.
Sin embargo recordó que en tiempos de la intervención, la Iglesia Católica era en en una sola institución las actuales Sedesol, Sedatu, la banca completa, Televisa, el Consejo Coordinador Empresarial y hasta el psicoanalista, ya que que regía hasta los momentos más íntimos de las personas y nadie escapaba de sus lógicas.
Subrayó que entonces la pugna entre liberales y conservadores no fue una rivalidad religiosa, sino por los principios de la Revolución Francesa: igualdad, libertad y fraternidad. “Y a mí me parece bien pelearse por principios, por valores, etcétera”.
Momentos antes de llevar a cabo un recorrido por la exposición, subrayó el papel de los medios de comunicación, -periódicos, revistas y carteles-, en la guerra entre conservadores y liberales.
La censura en los medios
Comentó una vez que los conservadores tenían a favor el aparato propagandístico de la Iglesia Católica, que era muy efectivo pues nadie podía oponerse a Dios, los liberales asumieron su calidad de ser los voceros del pueblo, de tal manera que si Dios tenía algunos designios, estos se lograban únicamente a través del pueblo.
Dijo que por esta razón durante la contienda entre liberales y conservadores existe una libertad de prensa o censura, dependiendo de quién ocupe la silla presidencial. “Si un liberal llegaba al cargo se promovía la publicación de revistas y periódicos, pero si llegaba un conservador se restringía su circulación, se cerraban periódicos y se castigaba a los editores y periodistas”.
De tal manera que editores de revistas o periódicos como Los Espejuelos del Diablo, la Orquesta, la Cucaracha, Sombra, Buscapiés y El Bertoldin sufrieron en algún momento la represión del gobierno conservador; como el Pájaro Verde, Sociedad, Cronista y Doña Clara fueron seriamente exhibidos en los gobiernos liberales.
En el pasillo derecho del ex convento, El Fisgón mostró que es tan buen historiador, como caricaturista, pero mejor liberal. Eso lo une al proyecto de Andrés Manuel López Obrador.
