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Tragedia en el Istmo: Asesinatos de infancias, falla de la sociedad

Foto(s): Cortesía
Gerardo Valdivieso Parada

JUCHITÁN, Oaxaca.- “Que se castigue con todo el peso de la ley a quienes cometieron este aberrante ataque a dos menores de edad, que no vinieron al mundo para morir de este manera”, declaró la defensora de los derechos humanos de las mujeres y de los niños, Rogelia González Luis, sobre los dos menores encontrados muertos a un costado de la carretera del Canal 33.

Dijo que el haber ultimado a ambos menores y haberlos tirado en un lugar solitario, habla de la violencia extrema que enfrentan los niños, que sufren además las mujeres que también han sido asesinadas y cuyos cuerpos han sido tirados en parajes solitarios.

La activista agregó que además de los responsables materiales, existen otros responsables del cruel fin que tuvieron los dos niños vendedores, que va desde la explotación infantil hasta el de la omisión, que corresponde a toda la sociedad y a los gobiernos.

“Nosotros como sociedad tenemos acciones de omisión, porque quizás muchos observamos a los niños y no pudimos actuar para dar notificación a las autoridades; y la omisión de las autoridades porque no hay voluntad política para atender estas desigualdades que enfrentan los niños huérfanos de madre o de padre, y se quedan al cuidado de las abuelas y que sufren diferentes violencias”, señaló.

Sostuvo que existen responsabilidades de falta de cuidado a los niños cuando aparecen asesinados y ultrajados, que habla de un sobre-descuido de los encargados de la paternidad de los menores que no los buscaron cuando no llegaron a casa, que no se esforzaron por hacer una búsqueda temprana y efectiva, y acudir a todas las instancias como la policía municipal y de género, el DIF, entre otros.

Añadió que el que dos niños inocentes sean encontrados muertos, habla de un descuido de toda una sociedad.

“Esto es lo que nos dice este crimen que nos ha impactado a todos, de que no hay protocolos de atención cuando vemos a niños y niñas en el crucero, a niños que están al cuidado de los abuelos que son agredidos, maltratados y golpeados; que son obligados a vender productos en la noche en cantinas, que era lo que hacían estos niños”.

Agregó que además del abandono en que están los menores, se agrega la violencia física y psicológica, está la violencia vicaria en donde un progenitor ataca a una hija o un hijo con el objetivo de causar dolor a la madre.

“Se deshumaniza a los niños para utilizarlos como un medio para poder violentar a la madre; cuando a la madre se les arrebata a los hijos y cuando las madres dejan a los hijos huyendo de la violencia”.

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