Desde hace tres años, este movimiento ha estado trabajando e investigando para transparentar la condición en la que viven los trabajadores encargados de la mano de obra de diversas marcas de ropa en el mundo.
¿Por qué es importante este movimiento?
Durante el colapso de un edificio de manufactura en Bangladesh hace 4 años, cerca de 1 mil 138 trabajadores perdieron la vida, dejando en evidencia las condiciones en las que laboraban.
Who made my clothes? La pregunta incómoda
Esta es la pregunta que encabeza dicha campaña, “¿quien hizo mi ropa?”, esta cuestión no sólo busca dar crédito a los trabajadores, si no evidenciar sus condiciones laborales. Conocer si la empresa no está explotando a su personal, si no son niños los que trabajan en una moderna “esclavitud”.
Esta iniciativa provocó que durante la semana del 18 al 24 de abril del 2016, más de 70 mil personas cuestionaran a empresas como Bershka, Metrona, H&M, entre otras, a través de redes sociales sobre el origen de la ropa. Al rededor de 1 mil 251 marcas respondieron a dicho planteamiento, generando una gran interacción en Internet.
I made your clothes, las empresas que respondieron
Con la finalidad de demostrar su preocupación por el tema, así como la importancia que tiene la voz de sus consumidores, algunas firmas respondieron a esta pregunta y no sólo eso, explicaron la forma en la que ayudan a sus trabajadores y apoyaron la iniciativa. Además presentaron a algunos de sus trabajadores a través de sus redes sociales.
Hilo de Nube, la primera empresa oaxaqueña en colaborar
Con manufactura de artesanas de San Juan Guichicovi, Hilo de Nube, decidió ser parte de este movimiento mostrando parte de su trabajo, el cual combate la migración y dignifica la labor de sus colaboradores.
En esta empresa oaxaqueña, que cuenta con 40 artesanas actualmente, se producen al rededor de 300 y 400 huipiles al mes y las mujeres obtienen un salario fijo cada 30 días.
