En nuestra ciudad existe una infinidad de sitios para conocer, descansar y hasta degustar diversos productos característicos de nuestro estado. Muy cerca del corazón de la ciudad, a un costado de la Plaza de la Danza y de la Basílica de La Soledad, está un jardín que sabe a historia, tradición y sabores muy deliciosos.
Hablamos del famoso Jardín Sócrates, el cual desde hace casi más de 37 años alberga en su espacio a casi una decena de negocios con las tradicionales nieves oaxaqueñas, las cuales se han ganado un lugar en el corazón de los nativos y turistas de todo el mundo. Y es que es imposible resistirse, más en tiempos de calor, a una deliciosa y tradicional nieve de leche quemada con tuna, limón, sorbete y distintas frutas de la temporada, así como las creaciones que cada negocio han logrado y que conquistan los paladares más exigentes.
Anímate a probar las creaciones de cada negocio. FOTO: Abdiel Velasco Escudero
Y sin duda alguna, este sitio suele ser visitado por decenas de personas que llegan a disfrutar los diferentes sabores de nieves que pueden encontrar. Pero para los vendedores, existen fechas emblemáticas donde todos los negocios están a su capacidad total: las vacaciones de Semana Santa, la Guelaguetza, y la fiesta de la Virgen de La Soledad, por lo que se ha acuñado una frase muy característica: “Si no fuiste por tu nieve al Jardín Sócrates, no viniste a la fiesta de la Virgen de La Soledad”.
Su propia historia
Pocos saben la historia, pero los ocho negocios de nieves que están hoy en el Jardín Sócrates, anteriormente no estaban en esa ubicación; es decir, su historia no nació en este sitio. Hoy, la quinta y sexta generación narran que todo inició en el corazón de la ciudad. Primero comenzaron a ofertar las nieves alrededor de la Plaza de la Constitución. Con el paso del tiempo, luego los ubicaron a un costado del Marqués del Valle; posteriormente pasaron a la Alameda de León,
Antiguamente, las nieves estaban en el corazón de la ciudad, en el zócalo. FOTO: Abdiel Velasco Escudero
Sin embargo, hace casi más 37 años, con la visita de Su Santidad Juan Pablo II, las autoridades municipales y estatales los reubicaron para que la Alameda estuviera libre de vendedores. Edilberto Santiago, quien tiene su negocio en este jardín, relata que ahora es toda una tradición visitar las nieves que están a un costado de la iglesia de La Soledad.
“Nuestros familiares, las primeras generaciones, iniciaron de manera rústica, con sólo una sombrilla para taparse; con el paso del tiempo, lograron obtener un techo, un local, y ahora con la visita del Papa, nos ayudó, porque remodelaron esta plaza, nos dieron el local y nos establecimos, y ya tenemos más de 37 años aquí vendiendo”, comenta Edilberto Santiago.
Nieve artesanal
María Elena Armengol y Edilberto Santiago explican que un gran atractivo para locales y turistas son ver las nieves en los tradicionales barriles. “Lo rústico le llama la atención a los clientes; pero ahora, para ahorrar espacio, sales, hielo, porque todo se incrementó, muchos ya emplearon el uso de hieleras, pero nosotros compramos una rústica, la que nos ayuda a conservar el sabor, y obviamente, seguimos congelando la nieve en los barriles”.
Un gran atractivo de estos negocios es ver cómo preparan las nieves en las tradicionales garrafas y barriles. FOTO: Abdiel Velasco Escudero
¡Tienes que probarlas!
Tómate tu tiempo, recorre los negocios, observa su amplia variedad de nieves que tienen para ti. Por ejemplo, María Elena Armengol nos cuenta que la nieve más pedida son las tradicionales, como la de leche quemada con tuna, sorbete, limón y nuez; sin embargo, cada negocio ya tiene sus creaciones que cautivan a muchos paladares.
“Se ofrecen siempre las tradicionales, las nieves de la fruta de la temporada, pero ahorita nosotros tenemos creaciones, como la de manzana verde que se llama “delicia tropical”, o la “fantasía” que tiene uva, melón y fresa, o en diciembre que hacemos una nieve de bombones”, comenta María Elena Armengol.
Leche quemada, tuna, limón, mamey, sorbete, entre otras, las más solicitadas. Abidel Velasco Escudero
Visita obligada
Para María Elena Armengol, visitar las nieves de La Soledad es toda una tradición que tanto locales como extranjeros poco a poco la han arraigado a sus actividades diarias. “Muchas personas vienen a misa y acabando pasan por su nieve, o ahora en estos tiempos de calor, se toman un descanso en los negocios, prueban y se refrescan con una nieve y continúan con sus labores”.
¡Anímate a probarlas!
Nieves de La Soledad o Jardín Sócrates
Avenida Independencia y calle de Morelos, Centro Histórico, Oaxaca de Juárez
Lunes a domingo
De 10:00 a 20:00 horas
+De
Al recorrer los negocios que están en este jardín, podrás conocer que este oficio ha traspasado generaciones. Y en nuestro recorrido, conocimos a distintas familias que conservan esta actividad por herencia familiar. Pero en especial, existen familias que sus antepasados aprendieron a elaborar las nieves en la Sierra Juárez, específicamente con la hermana del Benemérito de las Américas: Benito Juárez.
¿Sabías que?
Cuando estaban en la Alameda, los clientes nombraron específicamente dos nieves. Al salir del Sagrario, después de misa, siempre iban por su “nieve de confirmación”, la cual es la tradicional de leche quemada con tuna, mientras que la “nieve de bautizo” es la de sorbete.
