SAN PABLO ETLA, Oaxaca.- En el fraccionamiento La Esmeralda del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), de la agencia de Hacienda Blanca, diversas voces manifiestan las irregularidades que enfrentan, ante la apatía de las autoridades de este municipio.
Según la señora María Elena Gómez, representante del condominio 21, las inundaciones que dejaron las fuertes lluvias registradas hace cinco años, dejaron graves daños en algunas viviendas afectadas.
Agrega que todavía temen que con un fuerte aguacero vuelvan a inundarse las viviendas situadas en las partes bajas, porque “Pueblo Nuevo no quiere abrir el tapón que hizo atrás del fraccionamiento, porque supuestamente la constructora no pagó para la salida del agua, así que ésta se va por la puerta de una casa situada en el condominio 13, donde cada que llueve tiene que abrir la puerta para que siga el agua su corriente”.
Vecinos organizados
Por su parte, el arquitecto Ramón Martín Padilla Cruz dice que para fortuna de los habitantes del fraccionamiento, este año no ha llovido como anteriormente. “También hemos tenido la suerte de que los vecinos ya han empezado a organizarse para alguna contingencia, ya tenemos previsto romper muros y todo eso para facilitar la corriente de agua en caso de inundación”.
Explica que las aguas pluviales que provienen de las partes altas de la colonia La Joya y otras llegan hasta el fraccionamiento, “pero resulta que la agencia municipal de Pueblo Nuevo no nos deja conectar la tubería al drenaje pluvial para poder sacar el agua”.
Asevera que cuando se construyó el fraccionamiento, la constructora prometió a Pueblo Nuevo instalar luz pública a una zona habitacional, pero como no lo hizo no dejan que se conecten. “Tenemos un tapón de cantera de 40 centímetros de ancho por tres o cuatro metros de largo y dos metros de profundidad, entonces no lo podemos quitar; además, lo removemos y se nos vienen encima, porque ya no está dentro de nuestro territorio”.
Conflicto con Pueblo Nuevo
-¿Y las autoridades?
-Nada, como comité general del fraccionamiento hemos querido hacer mucho, pero hay muchas cosas por arreglar. Pero respecto a las inundaciones, estamos esperando que nos llegue un aguacerazo y nos volvamos a anegar. El municipio nos reclama el pago del impuesto predial, pero cómo le vamos a pagar si no nos da nada.
Destaca que ya se amplió el canal de aguas pluviales de la colonia La Joya, después de la inundación de hace dos años, pero no se pueden conectar porque se debe atravesar la carretera a México, entonces es un tramo federal y el trámite tarda mucho.
“Pero además, sólo son dos tubos de 40 centímetros, que son insuficientes y ahí se hace una laguna. Ese canal conduce las aguas pluviales de Hacienda Blanca a La Joya, pero cuando baja mucha agua se desborda y la avienta para La Esmeralda; lo grave es que también acarrea las aguas negras del canal que rodea a nuestro fraccionamiento, que está todo bardeado y no tiene salida”.
Servicio de limpia, incumplido
Por su parte, el señor Esteban, habitante del condominio 17, señaló que el servicio de limpia es otro problema que enfrentan, pues el camión sólo acude cada tres días, a pesar del gran número de viviendas habitadas.
Agrega que el camión del ayuntamiento no se detiene en cada condominio, lo que provoca que la gente tenga que salir con sus bolsas y caminar varios metros con su carga para depositarla, originando que algunas personas prefieran las camionetas del servico privado que cobran diez pesos por bolsa.
Apatía municipal
A su vez, la señora Angélica, pobladora del condominio 11, dijo que ella paga puntualmente su predial y por lo mismo exige que el municipio cumpla con las labores que le corresponden, como el servicio de limpia de las áreas verdes comunes, alumbrado público, vigilancia policiaca, entre otras.
Explica que los policías municipales sólo van al fraccionamiento de entrada por salida una o dos veces durante el día, pero en las noches "brillan por su ausencia" y no existen casetas de vigilancia en los accesos.
Señala que ahora con la amenaza del dengue, zika y chikungunya, se sabe que hasta la fecha hay 23 casos confirmados de zika sólo en el fraccionamiento; y a pesar de ello, el municipio no ha limpiado las áreas verdes ni desazolvado el canal de aguas pluviales que lo rodean.
Asegura que las inundaciones anteriores han enseñado a los vecinos que sólo con limpieza de los canales pluviales y el desazolve del gran canal, se evitan tragedias mayores.
Sin embargo, afirma que ella no se cambiaría de lugar de residencia; "tenemos agua todos los días; contamos con todos los servicios; es un lugar seguro; los vecinos estamos organizados contra la delincuencia; el transporte es completo y eficiente; aquí estamos bien y a pocos minutos de la capital", concluye.
Total de viviendas
1 mil 663 casas
El problema
La negativa de los habitantes de la agencia municipal de Pueblo Nuevo a permitir la conexión a su drenaje pluvial.
