Los manifestantes han amenazado con regar sus residuos en las calles del Centro Histórico de no ser atendidos por las autoridades municipales de la capital.
En el lugar donde se encontraba el centenario laurel del Zócalo de Oaxaca, mismo que cayó el pasado 7 de junio, fue sembrado un guamúchil, que ahora será una prioridad para el gobierno municipal.