Citlalli López Velázquez/ Ana Lilia Pacheco
Dentro de una crisis por la falta de relleno sanitario, la presencia de basura en las calles, así como la falta de separación, reducción y reciclaje en las viviendas, ponen en riesgo la salud pública en Oaxaca de Juárez.
“Este es un problema muy grave y que puede volverse de salud pública siendo más grave todavía. En este momento debemos de cooperar todos, sin excluir que debamos exigir a las autoridades que cumplan con su trabajo de resolver a fondo este conflicto que ya rebasa al gobierno municipal”, señaló el presidente del Observatorio Ciudadano del Delito, Ernesto Gutiérrez Jiménez.
El también expresidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Oaxaca destacó que ahora no sólo se hace obligatoria la respuesta del gobierno municipal sino también del gobierno estatal y federal sin olvidar la responsabilidad ciudadana para no complicar más la crisis.
“El hecho de salir a las calles en las noches a tirar la basura no resuelve el problema, lo agrava, entonces las personas que de forma poco consciente incurren en esta situación están complicándolo todo”, destacó.
Este domingo el sindicato 3 de marzo cumplió tres días instalados en el zócalo y la Plaza de la Danza con el llamado a depositar la basura en los espacios públicos y de mayor afluencia turística.
En este sentido Gutiérrez Jiménez exhortó a que hagan conciencia de lo que esto representa en un momento crítico.
“Esto nos va a afectar a todos"
Independientemente de la acumulación de residuos en lugares como los mercados públicos, sobre todo en el de abasto, otros espacios de gran afluencia actualmente se encuentran saturados de basura que conllevan a un problema de salud pública grave por contaminación de aire, suelo y agua.
“Esto nos va a afectar a todos. Como ciudadanos lo que debemos de tener es la conciencia de participar para resolver el problema y no complicarlo, debemos evitar tirar la basura y hacerlo en los momentos en que se deba recolectar”, insistió.
Además de los residuos sólidos urbanos, en algunos puntos de la capital del estado se observan animales domésticos muertos los que constituyen una potencial diseminación de enfermedades y contaminantes químicos a través de la cadena alimenticia, puede conllevar a la aparición de enfermedades parasitarias y diarreicas.
El polvo llevado desde un botadero abierto por el viento, puede portar agentes patógenos y materiales peligrosos que junto con el humo generado de la quema de basura en estos botaderos constituye un importante irritante respiratorio y puede hacer que las poblaciones afectadas tengan mucha más susceptibilidad a las enfermedades respiratorias.
Quema de desperdicio, otro problema grave
Desde el pasado 8 de octubre, fecha en la que se cerró el relleno sanitario ubicado en el municipio de la Villa de Zaachila, las calles de la capital oaxaqueña se han inundado de bolsas de residuos sólidos, volviéndose un foco de infección para la ciudadanía y visitantes, esto de acuerdo con Gerardo Aldeco Pinelo, presidente Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO).
Desde el pasado viernes 4 de noviembre, el Sindicato Independiente 3 de Marzo, encargados de la recolección de basura, tiró bolsas de desechos en el primer cuadro del Centro Histórico lo cual podría provocar enfermedades de la piel, oculares y gastrointestinales en las personas que trabajan o caminan por esos lugares.
El ambientalista compartió que en un foro organizado por el Consejo Ciudadano de Medio Ambiente Municipal de la capital oaxaqueña les informaron que estas enfermedades aumentaron un 50 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior.
Subrayó que la ciudadanía además de abandonar sus bolsas en las calles ha optado por quemarla, lo cual también es un peligro para la salud y el medio ambiente.
Destacó que el humo generado por la basura puede quedar suspendido por días en el ambiente, siendo un peligro para la salud principalmente en la población infantil, de la tercera edad y con bajas defensas.
“Es parecido (el humo) a los lixiviados, pues es una combustión de varios materiales de basura sin separar como plásticos, materia orgánica, pilas, cartón, unicel, fauna. Es espeso y por el tipo de residuos puede quedar suspendido en el ambiente por horas, incluso días”, señaló.
Gerardo Aldeco afirmó que aunque la quema de basura es una práctica común en algunas colonias y municipios, en exceso puede generar problemas de contaminación extrema.
“La recomendación es usar cubre bocas, evitar consumir alimentos en la calle con poca higiene, ya que hay ciertas bacterias que no se pueden curar con medicamentos y en caso de que se adquieran pueden vivir en el cuerpo de por vida pero deteriorando la salud, incluso de animales de compañía o de consumo humano. Es una situación realmente de riesgo extremo”, manifestó.
Advirtió que ni la autoridad ni la ciudadanía está preparada para enfrentar esta crisis de la basura en caso de prolongarse más tiempo, además de que en caso de que alguna embajada haga una alerta a sus ciudadanos por los riesgos sanitarios, esto impactaría inmediatamente la economía local que depende en una parte del turismo.
