La moda de hoy parece olvidarse de las mujeres que utilizan tallas medianas, es decir 42 a 44 europeo y 32 a 34 en México, aunque la mayoría está en ese parámetro.
Por eso, una famosa estrella británica del Instagram, Anushka Moore, lanzó un movimiento que se volvió muy popular, llamado MidSize Collective (Colectivo de Tallas Medianas).
Según ella, muchas marcas confeccionan prendas para mujeres de talla pequeña o de talla grande, pero se olvidan de las necesidades de las intermedias.
"Me he sentido un poco perdida porque realmente no encajo entre las blogueras delgadas o con las de tallas grandes. No encontraba famosas de tamaño medio para que las chicas como yo nos inspiráramos. Así que pensé que empezar esta cuenta para compartir fotos de las fabulosas mujeres de talla media y gran estilo que encuentro para que mujeres como yo puedan sentirse representadas y tener un lugar donde descubrir mujeres increíbles que saben cómo vestirse y celebrar sus increíbles cuerpos!", dijo la bloguera en su cuenta.
También en este tema existe un movimiento llamado #halcurvy, que propone reivindicar a las mujeres que usan la talla media, pues es la más vendida en todo el mundo, aunque no se promocione tanto como las demás ni haya influencers dedicadas a este segmento.
"En mis líneas, lo que más vendo son las tallas 32 a 34, es decir tallas medias por mucho, desde que nació mi marca hace más de 20 años", afirma la diseñadora Maru Paganoni, de la firma Tatoo.
Un ejemplo de instagramer de talla media que triunfa en las redes es Jill Kortleve, quien se hace llamar Jilla.tequila, la cual con sus looks para mujeres con curvas y de talla mediana posee más de 303 mil seguidores en su cuenta de Instagram.
Así también lo comprueba la plataforma True Fit, con más de 200 millones de usuarios y 16 mil marcas, misma que asegura que en el ámbito mundial el 38 por ciento de sus usuarias utiliza tallas medianas.
Aunque a veces el problema real tiene que ver con la diversidad de tallas que existen en las marcas y la diferencia en los patrones, que son realmente diferentes de país a país, por lo que a veces estas mujeres tienen que recurrir a las tallas XL, cuando en realidad no lo son.
