Nos acercamos a las fechas de cierre de año, una temporada ideal para la reflexión y planteamiento sobre el rumbo que ha ido tomando la vida en el transcurso de los días y tomar las acciones necesarias para seguir adelante. Es, por lo general, una época de reforzamiento de la identidad o el momento propicio para generar los cambios que se consideran necesarios para ser una mejor persona, o al menos para intentar serlo.
El fin de año es también una época perfecta para cerrar ciclos; acercándose el inicio de año nuevo, es normal y natural (al menos para el mundo occidental que los celebra en estas fechas) como en esta ocasión es caso de la columna "Estas letras Que Lees", que después de varios años publicándose los días miércoles en estas páginas impresas y en la versión en línea, ha culminado con un ciclo en el cual se ha compartido un poco de los sucesos históricos y culturales de trascendencia en Oaxaca, México y el Mundo.
Durante estos años han sucedido múltiples cosas. Desde antes de la pandemia, esta columna comenzó su acompañamiento al calendario cultural. Todos los miércoles (salvo algunas excepciones por motivos ajenos a la editorial) se publicaban contenidos sobre exposiciones y artistas, tanto locales como extranjeros, promoviendo los espacios de expresión que hay en la ciudad, intentando además, hacer difusión a trabajos representativos de la idiosincrasia municipal, estatal y nacional, publicando entrevistas con diversos artistas multidisciplinarios que hacen su trabajo en estas tierras.
También, y de manera más personal, se realizaron la cobertura a conciertos del género de Metal, logrando entrevistas con agrupaciones musicales internacionales de renombre como Brujería, WarCry, Tierra Santa, Jet Jaguar, entre otros tantos que se escapan de la memoria. Del mismo modo, se ha realizado un análisis sobre el estado de la cultura local, la forma en la que el oaxaqueño vive y siente su folclore, además de realizar diversas propuestas que buscaban mostrar que más allá del folclore, Oaxaca también tiene mucho que ofrecer.
Las actividades culturales que se realizan en Oaxaca son muy diversas; por lo general van acompañadas de gran apoyo por parte de los públicos que las visitan constantemente. Si bien el comercio del arte en sí es un negocio al que pocos se animan a entrarle, la contemplación del arte sí es algo que se vive intensamente dentro de los espacios propios para ello. Afortunadamente (o quizá lo contrario) la ciudad de Oaxaca es reconocida como una central cultural dentro del sureste mexicano y eso ha llamado la atención a más de una persona alrededor del mundo, quienes visitan Oaxaca de manera constante.
En fin, ahora que cerramos un ciclo, también se agradece a aquellas personas que se tomaron la molestia de enviarnos un correo electrónico con sus opiniones; fueron pocas, pero muy importantes. Para finalizar, en esta época de fin de año y reflexión, me gustaría recordar que hoy es día de los Santos Inocentes y es una fecha para estar despierto. ¡Inocente palomita, te dejaste engañar, sabiendo que este día nada se puede confiar! ¡Nos leemos el próximo año! Esperando que este fin de año les rodee la felicidad y la alegría.
"Las actividades culturales que se realizan en Oaxaca son muy diversas; por lo general, van acompañadas de gran apoyo por parte de los públicos que las visitan constantemente".
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