Alejandro José Ortiz Sampablo
Un motivo frecuente por el cual las personas buscan tratamiento psicológico está relacionado con los problemas en el amor de pareja, ya sea porque han fracasado en la última relación, porque no encuentran el ideal o simplemente porque se les repite la historia una y otra vez, entre muchas más expresiones de la dinámica del amor.
El detalle
Si bien, en gran medida, los problemas amorosos están sobredeterminados por las leyes a las que obedece la dinámica psíquica del enamorado —de la que por regla general este no se percata, a pesar de que la vive y actúa—, en muchos casos, si la persona presta docilidad, dichos problemas, en gran medida, pueden evitarse.
Cuando digo “prestar docilidad”, no aludo a que el enamorado o enamorada ceda a cuanto capricho imponga la contraparte o a que, como se dice popularmente, “doble las manos” cada vez que se presente un conflicto. Cuando una relación de pareja no marcha en un supuesto —llamémosle “amoroso”—, uno de los dos implicados sale lastimado. Estadísticamente, son más las mujeres quienes terminan por pagar los platos rotos en las relaciones amorosas; esto no significa que los hombres no padezcan por amor, pero como decía el cómico mexicano, "¡ahí está el detalle!"
Amor y diferencia sexual
Hablar del amor sin contemplar la diferencia sexual nos llevaría a cometer un sinnúmero de imprecisiones. Las consecuencias psíquicas del descubrimiento de la diferencia sexual en el niño y la niña fue uno de los más grandes aportes de la investigación realizada por el creador del Psicoanálisis, Sigmund Freud. Dichas consecuencias se expresan de distinta manera, tanto en los afectos como en la conducta del hombre y de la mujer.
En otras notas he mencionado que una de las consecuencias, la más ostentosa en el caso del hombre, es lo que Freud teorizó como “placer de órgano”. Aunque podríamos decir que más que consecuencia, es una fijación en un estado primitivo del desarrollo psíquico, que las más de las veces se expresa como un imposible a que el hombre abandone su placer, lo que a la postre le impide el amor.
Para la mujer las cosas son distintas, difícilmente se quedarán fijadas en el placer de órgano, pues el encuentro con la diferencia sexual las lleva a un desarrollo psíquico superior, pero no por ello ajeno de conflictos, posiblemente mucho más complejos. Esta parte de la teoría freudiana es poco comprendida, y por las malas interpretaciones de algunos —generalmente hombres— el Psicoanálisis ha sido atacado y tachado de misógino. Sin embargo, fue el mismo Freud el que le brindó, tanto a la mujer como a lo femenino, el más alto lugar en su constructo teórico, pues finalmente plasmó lo que su observación como investigador le arrojó como resultado.
La invitación
En el curso que llevaré a cabo los días 8, 9 y 10 de diciembre, hablaremos del amor desde lo que la investigación en la clínica psicoanalítica nos ha brindado. El asistente conocerá cómo opera eso que llamamos placer de órgano, así como los fantasmas psíquicos de la mujer, que la llevan a quedar a merced del amor.
¿Quieres saber más? Escúchanos este viernes en punto de las doce del día por: https://www.facebook.com/RadioUnivas. Pide informes a los teléfonos 951 244 7006/951 285 3921 y ¡Hazte escuchar por un psicoanalista del INEIP A.C.!
