Oaxaca.- La difícil situación económica en el país y la colindancia con Veracruz y Guerrero provocó el incremento en la incidencia delictiva en el estado, aseguró el presidente del Observatorio Oaxaqueño del Delito, Ernesto Gutiérrez Jiménez.
El factor económico incide, explicó, porque se reducen las fuentes de empleos y oportunidades para las personas quienes optan por delinquir para garantizarse su subsistencia.
Oaxaca de ser uno de los estados más seguros del país, ahora está en la lista de los más violentos. Ha registrado aumentos en homicidios dolosos, secuestro y violaciones. Este salto en la inseguridad, opinó, se debe principalmente a la frontera que se comparte con entidades que tienen problemas de delincuencia organizada desde hace por lo menos dos años.
“En Veracruz la delincuencia ha sido terrible, un incremento muy importante en la violencia el año pasado y antepasado. Eso hace que todo lo que ocurre, pues nos avientan los muertos en Tuxtepec y aparecen como nuestros”.
Movilidad de la violencia
El incremento en las cifras de homicidios dolosos en el estado, sostuvo, se debe a la violencia en las regiones de la Cuenca del Papaloapan y el Istmo de Tehuantepec. La comisión de delitos en estas zonas del estado dispararon los delitos. El presidente del Observatorio, sin embargo, aseguró que esto no es una situación generalizada en todo el territorio oaxaqueño.
“Es un salto brutal. A ese lugar saltamos por todo lo que ha sucedido en el Istmo, ahí no hay día que no haya un ejecutado. Lo que sucede allá y en Tuxtepec, se refleja en todo el estado. Afortunadamente no es la misma situación en la capital, aunque se empiecen a ver algunos casos pero no es la misma.
Ernesto Gutiérrez afirmó que es preocupante los datos de Semáforo Delictivo que señalan que el 41 por ciento de los homicidios registrados en Oaxaca, el año pasado, fueran ejecutados por el crimen organizado.
Pero advirtió que las instancias encargadas de la seguridad pública en el estado no ha informado a la ciudadanía sobre este tema y la situación en la que se encuentra la entidad. Por lo menos, aclarar si las cifras son reales o no, y para no caer en especulaciones sobre si es o no la delincuencia organizada.
“Primero que se nos informe a la ciudadanía el resultado de esas investigaciones para que no supongamos, para que nos diga porqué fue, a lo mejor fue una venganza, un asunto pasional, o de delincuencia organizada”.
El presidente del Observatorio Oaxaqueño del Delito, Ernesto Gutiérrez, opinó que el hecho de que ocurran este tipo de homicidios en la entidad, quiere decir que se está saliendo “un poco de control” la seguridad pública.
Y es responsabilidad del Estado, finalizó, en sus tres órdenes de gobierno, garantizar la seguridad pública de los ciudadanos.
