El presidente en Oaxaca de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Raúl Ruiz, conminó a la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y al gobierno del estado a retomar el diálogo para evitar que el conflicto escale y tenga repercusiones sociales y económicas.
El empresario oaxaqueño consideró que debe haber flexibilidad de ambas partes para regresar a la mesa, pero sobre todo el magisterio debe dejar la intransigencia y tomar los canales abiertos para expresar sus demandas.
Este viernes y sábado la sección 22 reinició los bloqueos carreteros en la capital por sentirse engañados por el gobernador del estado, por no acudir a la mesa programada para abordar el conflicto.
La Comisión Política del magisterio acudió el viernes a Ciudad Administrativa, donde a las 10:00 horas se reunirían con el mandatario; sin embargo, únicamente se encontraban los titulares de la Secretaría General de Gobierno (Segego) y del Instituto Estatal de Educación Pública (IEEPO), con quienes rechazó dialogar.
A su vez los titulares de ambas dependencias precisaron que ni las demandas legítimas de los maestros o el interés superior de la niñez pueden ser rehenes de grupos que buscan la confrontación como modo de vida.
“A estos grupos se les dice con claridad que este Gobierno no permitirá más chantajes, que hay disposición a escuchar y dialogar para construir acuerdos que nos permitan resolver, en el marco de la ley, los desafíos educativos del estado”, indicaron en rueda de prensa convocada el pasado viernes.
Ruiz Robles consideró que para avanzar en la resolución del conflicto debe haber un esquema diferente al de presión-negociación-presión.
“En una negociación no se pensar que toda la razón la tienes tú y que todas las vas a sacar a tu favor. La negociación es cedo, obtengo, cedo, obtengo y llegar a un acuerdo para que sea ganar-ganar, de lo contrario es imposición.”
Resaltó que no debe ser a través de la afectación a la ciudadanía como se obtenga un beneficio para un grupo de personas. “No se puede afectar a toda la sociedad, a todo Oaxaca por intereses de unos cuantos, aunque sean muchos. Oaxaca es de todos los que vivimos aquí y no sólo de ellos o del gobierno”.
