Texto y fotos: Alexei García
Las festividades llenaron de color las calles de la capital oaxaqueña. En el Andador Turístico se observa la representación de la muerte, calaveras que no lloran sino ríen divertidas, alimentando la relación mística de los mexicanos con el paso hacia lo eterno, hacia lo desconocido. El naranja del cempasúchil y el rosa de la “cresta de gallo” también hicieron presencia; en medio de la festividad, se asoma la tristeza de los vendedores del Mercado “Benito Juárez”, quienes ahora ven como una posibilidad el fin de sus comercios.
Cuarenta y cinco años tiene doña Bertha Vázquez Santiago como comerciante establecida en el Mercado "Benito Juárez". Afirma, con tristeza, que están pasando por uno de los momentos más complicados; las ventas se han desplomado por dos motivos: primero, la pandemia de COVID-19 y posteriormente, la llegada de los vendedores ambulantes a las calles.
El local de doña Bertha se encuentra lleno de productos alusivos a esta temporada de Muertos; no obstante, en su semblante se refleja la tristeza, la desesperación, no hay tranquilidad. Revela que debido a las bajas ventas, ante las condiciones que se dieron por la pandemia del SARS-CoV-2, decidió bajar las cortinas de su negocio durante un tiempo.
Considera que esta temporada de Fieles Difuntos la situación sería más favorable, que el viento soplaría en su favor; no obstante, la realidad superó sus expectativas. Asegura que la presencia de los ambulantes les ha afectado aún más en sus ingresos, pues prevalece la tranquilidad en los pasillos del Mercado “Benito Juárez”, sitio que antes cobraba especial vida durante estos días, pero ahora tiene más silencio que una tumba olvidada por familiares y amigos.
Como una foto colgada en la pared que ya nadie mira, así considera doña Bertha que está sucediendo con su negocio. Ese local que tantas veces la vio reír, observó cuando se santiguaba con la primera venta, ahora ve cómo la intranquilidad la rodea; pero las paredes no hablan, ni tampoco consuelan.
Los ambulantes, competencia desleal
“El ambulante nos dio en la torre con toda esas ventas de productos que tienen allá afuera, que a veces ni son de aquí de la ciudad de Oaxaca, pero el gobierno no sé qué pretende. Primero la pandemia nos amoló y ahora esto, pues vamos a ver hasta dónde aguantamos. Aquí adentro pagamos luz, teléfono, a veces buscamos empleadas y pues las ventas están muy bajas”, afirma.
Bertha Vázquez Santiago asegura que actualmente las ventas de los productos de temporada se encuentran en un 30 por ciento. “A cómo se vendía anteriormente, están bajísimas”, reafirma.
“Ya no podemos más, a veces nos ha dado por cerrar. Yo, la verdad, esta temporada empecé a abrir otra vez, pues por la pandemia y ahorita hasta me estoy desanimando, pues porque no hay venta”, lamenta, como clamando justicia hacia el viento.
Asegura que los ambulantes representan una competencia desleal, porque no pagan impuestos; además, sus productos no necesariamente tienen conexión con la entidad oaxaqueña, por lo que los precios en algunas ocasiones son más baratos y además, debido a la forma en que se encuentran colocados, representan un mayor riesgo en el tema de contagios de SARS-CoV-2.
“Ya no se puede, ya no se puede porque es muy difícil la situación que estamos viviendo aquí adentro”, señala, hablando con el alma en la mano. Afirma que como locatarios del mercado “Benito Juárez” han realizado marchas, manifestaciones y reuniones con las autoridades municipales; no obstante, los resultados son nulos. Todo ha sido en vano, como cuando llega la muerte.
El gobierno, mero espectador
Doña Bertha Vázquez Santiago considera que las autoridades, el gobierno, son meros espectadores de este espectáculo, pues a pesar de que se les ha pedido su intervención como autoridad, no han respondido.
Afirma que la administración municipal de Oswaldo García Jarquín es la peor en todo el tiempo que tiene de vida. “El señor Jarquín ha vendido espacios en las calles, en los diferentes puntos de la ciudad, como quiere y como puede”, asevera.
“Ojalá que el gobierno nos ayude, que tome en cuenta que pagamos impuestos, que nuestras familias dependen de nuestras ventas, que si no hay ventas vamos a la quiebra, a veces nos orillan a cerrar porque ya no se puede”, finaliza, sin perder la fe, pero sabiendo que esta batalla podría acercarse a su fin.
- 70 % se han reducido las ventas
- 45 años tiene doña Bertha Vázquez en el Mercado "Benito Juárez"
- 30 % de ventas registran durante esta temporada de Muertos
“Ya no podemos más, a veces nos ha dado por cerrar. Yo, la verdad, esta temporada empecé a abrir otra vez, pues cerramos por la pandemia y ahorita hasta me estoy desanimando, pues porque no hay venta”.
Bertha Vázquez Santiago
Locataria
“Ojalá que el gobierno nos ayude, que tome en cuenta que pagamos impuestos, que nuestras familias dependen de nuestras ventas, que si no hay ventas vamos a la quiebra; a veces nos orillan a cerrar porque ya no se puede”.
Bertha Vázquez Santiago
Locataria
