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Irene: 15 años sin justicia tras negligencia médica

Foto(s): Cortesía
Redacción

BARRANCA FIERA, Santa Cruz Itundujia, Oaxaca.- El ruido de las aves de corral dan la bienvenida en una humilde casa construida a base de madera, lámina, ladrillos y más de una década de penurias. En el paraje Barranca Fiera, agencia municipal de Morelos, Santa Cruz Itundujia, adentro de un cuarto de 12 metros cuadrados, está postrada de por vida Irene Cruz Zúñiga, sobreviviente de una negligencia médica.

 

Los rayos de sol que entran por una de las dos puertas de la habitación bañan el rostro y cuerpo inmóvil de Irene; el astro rey poco o nada puede hacer por regresarle la fuerza y movilidad a sus músculos y articulaciones, daños que recibió tras una incorrecta aplicación de anestesia el 22 de junio de 2001. Han pasado más de 15 años de aquel trágico día.

 

 

Un error médico, con un responsable directo y varios indirectos en el hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la comunidad de Tlaxiaco, en la región de la Mixteca, provocó que ahora la madre de un adolescente de 15 años use pañal y sea alimentada con papillas y alimentos líquidos.

 

 

La señora nunca pudo jugar con su hijo, alimentarlo y abrazarlo; sus ojos cristalinos y perdidos reflejan resignación.

 

 

 

 

 

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Guerreros de la vida

 

 

Después de un arduo día de trabajo en el campo, actividad a la que se dedica la mayoría de la comunidad con menos de 100 habitantes, Carlos Cruz Zúñiga, hermano de Irene, comparte con su familia un plato de arroz, frijoles, quelites y un huevo estrellado, todo producto de su propia cosecha. El autoconsumo es común en esta zona de la Sierra Sur.

 

 

Tras agradecer a Dios por los alimentos y un día más de vida, Carlos recordó cómo su hermana, antes de dar a luz a Epafrodito Núñez Cruz, salió caminando de su hogar para ser trasladada en una ambulancia hasta la presidencia de Itundujia, donde médicos pasantes no pudieron atenderla y ordenaron su traslado a Tlaxiaco, lugar donde comenzó la tragedia.

 

 

"Llegué de trabajar y las vecinas me informaron que mi hermana  sintió los dolores de parto y se fue a Itundujia; confiado que estaba bien me fui a la cabecera municipal, pero al llegar me mandan a Tlaxiaco donde según estaba internada; ahí me dicen que Irene está en el Hospital Civil Doctor Aurelio Valdivieso de Oaxaca porque las cosas se complicaron, me preocupé. Me trasladé  a la capital  y cuando la veo internada estaba irreconocible, con el cuerpo demasiado inflamado, no podía creerlo, ya no era mi hermana", recordó de forma nostálgica, Carlos Cruz.

 

 

El relato es interrumpido por los quejidos de Irene, quien con el movimiento de sus ojos aprendió a comunicarse con su papá y dos hermanos, quienes están al pendiente de todas sus necesidades y luchan con ella en cada momento como unos guerreros de la vida.

 

 

Cada semana debe acudir una terapeuta a brindarle sus masajes musculares a Irene, para evitar que su cuerpo, con huellas de maltrato muscular e inactividad se llene de llagas; demasiado tarde: la enfermera lleva dos semanas sin ir y las úlceras comienzan a brotar.

 

 

“Las personas se justifican que no vienen por lo lejos, de aquí a la capital son más de siete horas de camino”, subraya su familiar mientras acomoda en su cama a Irene y luego la cubre con una sábana, mientras su papá se queda vigilando a su hija inmóvil de 40 años de edad.

 

 

Con mamá en cama

 

 

 

 

 

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Durante la tarde, después de salir de la Telesecundaria, Hepafrodito llega a su hogar, hace su tarea, repasa sus lecciones y sale a dar un paseo en los terrenos cubiertos de mangos, plátanos y árboles de gran altura.

 

 

El hijo de Irene vivió sus primeros años sin saber las peripecias que pasó su familia, quienes después de meses de tenerla internada fue trasladada a su casa, entre litigios, vueltas burocráticas y dictámenes médicos, sin ninguna solución e indemnización.

 

 

"Hasta que iba en quinto año me di cuenta que mi mamá estaba en una situación diferente; me puse triste, pero qué puedo hacer; ahorita mi prioridad es la escuela", enfatizó antes de quedarse pensativo quien forma parte del cuadro de honor y piensa estudiar medicina.

 

 

El adolescente, de pocas palabras, toma su balón y se pierde en el campo; el juego y la escuela son su alivio ante su peculiar situación, de tener una mamá en estado vegetal.

 

 

 

 


 

 

El perdón

 

 

 

Para Carlos Cruz y toda su familia la vida no es fácil, acepta que por momentos llegó a ser presa de la desesperación, sabe que su caso no es un asunto aislado, pero pide solución para que esto no se repita.

 

 

"Poco a poco se va alejando el sentimiento en contra de los médicos, me queda un mal sabor de boca pero por ahora la prioridad son Epafrodito e Irene, sólo pido justicia", sentencia quien dice que ya perdonó porque nunca conoció a los responsables.

 

 

A Irene también la violentaron obstétricamente, pues le colocaron un Dispositivo Intrauterino (DIU) sin su consentimiento, aunado al daño cerebral irreversible que le ocasionaron los galenos.

 

 

Interviene la CNDH

 

 

En octubre de 2015, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en la recomendación 32/2015 exhortó a las autoridades del IMSS encabezadas en ese entonces por el ahora director general de Petróleos Mexicanos (Pemex) José Antonio González Anaya,  y al Gobierno del estado, para dar cumplimiento con la reparación del daño a la mujer indígena y su familia.

 

 

También Amnistía Internacional se sumó a la demanda e inició la campaña Alza tu voz, para pugnar por dicha reparación, donde ocho mil 600 personas firmaron el llamado en línea y lo entregaron a las autoridades.

 

 

 

 

 

Informe 2015

 

 

Según la Comisión Estatal de Arbitraje Médico de Oaxaca (CEAMO), en su informe 2015, atendió de enero a diciembre 62 quejas.

 

 

Del sector privado la CEAMO recibió 29 quejas, lo que representa el 46. 77 por ciento, seguido de 15 casos en la Secretaría de Salud (SSO) igual al 24.19 por ciento, por 13 lamentaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social que es un 20.96 por ciento y cinco quejas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

 

 

 

 

 

"Poco a poco se aleja el sentimiento contra los médicos; me queda un mal sabor de boca, pero por ahora la prioridad son Epafrodito e Irene; sólo pido justicia",  Carlos, hermano de Irene

 

 

Cifras de dolor

 

 

62 quejas por negligencia recibió la CEAMO en 2015

 

 

8 mil 600 personas firmaron en favor de Irene

 

 

14 años después, la CNDH emitió una recomendación

 

 

15 años tiene el hijo de Irene

 

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