Oaxaca.- La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, dará a conocer a la brevedad un informe parcial y luego un definitivo sobre los hechos violentos de Nochixtlán, que derivaron en nueve muertos, 108 lesionados y secuelas de dolor para los deudos.
Ello fue adelantó por su presidente Arturo Peimbert Calvo, al tiempo de sumarse a la propuesta de la jerarquía de la Iglesia Católica, de declarar en la entidad una tregua general para serenar los ánimos y sentar las bases de un diálogo propositivo y transparente, entre un sector de la Sección 22 del SNTE, y autoridades estatales y federales en la Secretaria de Gobernación.
Ello, independientemente del informe que en su momento rindan los relatores del Alto Comisionado de la ONU para los derechos humanos en México. Informó que los relatores también estuvieron en Nochixtlán, luego de los hechos sangrientos del 19 de junio, en la búsqueda de testimonios y evidencias materiales para sustentar la probabilidad de violaciones a derechos humanos.
La fecha para ello, no la sé, porque esa instancia es autonómica, precisó el titular de la DDHPO.
El presidente del órgano autónomo se reservó de adelantar sobre los resultados del informe de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, pero aseguró que lo que se dará a conocer constituye un parte aguas en la historia estatal.
Este domingo, la jerarquía católica de Oaxaca, celebró la apertura al diálogo en la Ciudad de México, entre los actores involucrados y el sector del magisterio en desacuerdo con la reforma educativa.
Para el Arzobispo, el diálogo deberá estar cimentado en la verdad, que abone a la unidad y ofrezca prioridad al bien de toda la sociedad; un diálogo que genere acuerdos claros y sustantivos a los que un Comité Ciudadano pueda darle seguimiento.
El documento leído por el Arzobispo José Luis Chávez Botello y respaldada por los Obispos Oscar Campos Contreras (Tehuantepec), Héctor Guerrero Córdova ( Mixes), PEDRO Vásquez Villalobos (Puerto Escondido), José Armando Álvarez (Huautla), José Alberto González Juárez (Tuxtepec) y Gonzalo Calzada Guerrro, Obispo Auxiliar de Antequera, abona al diálogo y a la estabilidad social.
Arturo Peimbert Calvo dijo que es fundamental la aportación ciudadana, en este caso de los oaxaqueños conocedores de la realidad educativa y social de Oaxaca, y con probada solvencia moral para enriquecer la mesa de diálogo que se desarrolla en la Ciudad de México, con la asistencia de los actores involucrados.
