El delegado de la Policía Estatal en Puerto Escondido, Gustavo Eduardo Castellanos Castellanos fue sentenciado a cuatro meses de prisión y una multa de 680 pesos con 40 centavos, por vender una camioneta sin contar con la factura correspondiente.
El funcionario de gobierno, de 34 años de edad, le vendió a uno de sus supuestos amigos, la unidad marca Dakota, modelo 2007, color zafiro con placas de circulación locales RV-74-177, por una cantidad de 96 mil pesos, y terminó amenazando al comprador por exigirle el documento que avala la transacción.
Según el expediente 47/2013, el 11 de octubre de 2011 Juan de Dios conoció al mando policíaco en las oficinas de la Sub Dirección de Asuntos Internos de la Secretaria de Seguridad Pública del Estado, donde comenzó una supuesta amistad y le comentó que vendía un vehículo.
El vecino de la calle Benito Juárez de la comunidad de Reyes Etla, citó a su cliente en el restaurante Vicky de Zicatela, Puerto Escondido, donde se hizo la transacción y le entregó la camioneta junto con la tarjeta de circulación.
Enseguida, Castellanos Castellanos le dijó que iba a realizar unos trámites y posteriormente le entregaba la factura del vehículo, pero nunca cumplió pues aseguraba tener padrinos que lo protegerían de cualquier cosa.
