Uno de los grandes platillos de la gastronomía griega es la moussaka o musaka, la cual tiene una gran similitud con la famosa lasaña, digna representante de la comida italiana. Sin embargo, este platillo tiene un toque especial, pues sus ingredientes le dan esa distinción que ningún otro platillo lo puede tener.
Hablar de la musaka, es saber que estamos a punto de conocer platillo muy rico que poco a poco va ganándose un hueco en los hogares gracias a su estupendo sabor y textura.
Este suculento platillo también tiene una gran facilidad de poder cambiar algunos de sus ingredientes, pero lo mejor de todo es que, sin importar eso, la esencia del platillo no cambiará por nada, pues la berenjena y el queso son el alma de la musaka.
Origen
La musaka es una receta que se originó al parecer en Oriente Medio y la zona de los Balcanes. Sin embargo, es curioso ver como la receta más conocida es la griega. La receta es conocida desde principios del siglo XIII en la zona de oriente, donde la receta no se preparaba con berenjenas como hacemos ahora, pues eso es algo que se añadió con mucha anterioridad. De hecho, es en la musaka griega donde se empezaron a utilizar las berenjenas como ingrediente.
Por el resto del mundo, no empezó a expandirse hasta bien entrada la primera mitad del siglo XX. Sin embargo, en los países de oriente, la berenjena no se utiliza, y en su lugar se emplean las papas, aunque todavía es posible encontrar la receta donde se combinan ambos ingredientes para lograr este plato.
La tradicional
La musaka, al estar hecha principalmente con las berenjenas, resulta un alimento que contiene bastante fibra, lo que la hace perfecta pues es muy ligera y ayuda con el tránsito intestinal si está un poco “alterado”. Contiene además una cantidad considerable de potasio, mineral que ayuda a que nuestro corazón funcione como es debido, así como contribuye a la generación de proteínas que nuestro cuerpo absorbe para trabajar correctamente el día a día.
Ingredientes
1 berenjena grande
400 g de carne picada de cordero o de ternera
1 cebolla
1 zanahoria
3 tomates de freír
1/2 vaso de vino
1/2 vaso de caldo de carne o de pollo
Tomillo, sal, pimienta
Queso rallado
Salsa bechamel
Preparación
Para preparar este famoso plato de la gastronomía griega, primero hay que cortar las berenjenas en láminas y las ponemos con un poco de sal sobre un papel absorbente para que recoja el agua que suelten y así las berenjenas no tendrán ningún regusto amargo. Después las freímos ligeramente y las reservamos.
Por otra parte, picamos la cebolla y la zanahoria en brunoise y las freímos en una sartén. Cuando estén blanditas, añadimos los tomates muy picados y dejamos que se cocinen en la sartén hasta tener un buen sofrito o salsa para la carne. Freímos ligeramente la carne picada en una sartén, la añadimos a la salsa de tomate y agregamos el tomillo, el vino y el caldo, dejando que cueza durante unos diez minutos hasta que no quede rastro de líquido.
Finalmente, hacemos una salsa bechamel con 25g de harina, 25g de mantequilla y medio litro de leche, removiendo hasta que esté bien espeso. Con todos estos preparativos, podemos comenzar a montar el plato para después hornearlo.
En la receta habitual de moussaka no se necesita más procedimiento, pero en la mayoría de recetas tradicionales de moussaka en Grecia, se pone una primera capa de patatas cortadas en rodajas y fritas ligeramente. Esta capa hace de base para la moussaka. Sobre las patatas se pone una primera capa de berenjenas que después se cubren con una capa de carne.
Sobre la capa de carne ponemos otra capa de láminas de berenjena y volvemos a cubrir con la carne de cordero con la salsa, aplastando un poco con el dorso de la cuchara para que quede bien compacta. Finalmente cubrimos con bechamel, espolvoreamos con queso rallado y metemos la fuente en el horno donde horneamos durante 20 minutos a 160º y gratinamos 3 minutos a 220º.
Variantes
Papas
Pollo
Atún
Vegana
Thermomix
+De
La receta de moussaka griega es una delicia que gusta a todos. Como es un plato bastante saciante, es mejor tomarlo como plato único, en todo caso precedida de una sopa fría o algo muy ligero. Sus hierbas de la zona como la canela, romero, orégano y pimienta hace de este un plato típico de ese país. Por ello, es un platillo único, muy completo y sobre todo, riquísimo.
¿Sabías que?
Este esplendido pastel de berenjena va relleno de salsa de tomate reducido con vino blanco, carne de cordero picado, bechamel, papas picadas y queso parmesano gratinado.
