Mónica Ortiz Sampablo
Leer una novela es una experiencia que emociona; leer las cartas de quien escribe una novela cimbra los sentidos. La exploración de las cartas que fueron escritas por grandes personajes de la literatura fue más que revelador; me ofreció espacio para el análisis, la reflexión, pero, sobre todo, para la empatía.
De las grandes bondades de la web, llegan esos regalos que uno descubre en las búsquedas en este gran aparato virtual; las misivas, abrevadero de letras, ahí es donde se termina de comprender o se intenta armar el rompecabezas de vidas llenas de tormento, de gozo, soledades que se fraguaron en las páginas de poemarios, de cuentos o novelas. Cartas que se han reunido en libros editados, reeditados, lo cual indica que por siempre el chisme es y seguirá siendo un producto rentable. Aunque este tipo de lecturas no solo se reducen al morbo, ya que, en un aspecto más serio, nos permiten comprender el contexto en el que a escritoras y escritores les tocó vivir.
Espero en este 2024 tener la oportunidad de continuar la exploración en las misivas de quienes dieron su vida a la literatura, dejaron a su paso huellas míticas y en sus cartas nos permiten profundizar en sus emociones netas. Fueron muchos los que en diferentes épocas dirigieron misivas a sus madres, amigos, amantes o amores prohibidos. Cabe mencionar la temporalidad como aspecto fundamental, ya que en la actualidad me encantaría preguntar a los escritores si se han dado a la tarea de cartearse como en otros tiempos lo hicieron Antoine de Saint Exupery, Virginia Wolf, Gabriela Mistral, Franz Kafka, Alejandra Pizarnik, Juan Rulfo, Emilia Pardo Bazán, entre otros; o han dejado que “la nube” haga lo propio con sus más íntimas conversaciones.
Después de todo, si nos colocamos en la línea de tiempo, veremos que en la actualidad la figura del escritor también está dotada de una vida pública que puede consultarse en las redes sociales. Si queremos saber un poco más sobre nuestros escritores o escritoras más admirados, podemos echar ojo a lo que tuitean o postean. Los tiempos brindan la oportunidad de transparentar lo que somos de una u otra forma, pero la escritura es la herramienta que hasta el momento permite que sea posible expresar lo que subyace en nuestro ser.
