Jesús Antonio Martínez Carrasco
La política no tiene relación con la moral: Nicolás Maquiavelo
Primera de tres partes
El mes pasado escribí una nota acerca de la herida narcisista y una de las cosas que yo mencionaba era el duro golpe que la realidad me había asestado con respecto de lo aprendido sobre política desde mi adolescencia. Desde hace dos años, mi concepto de política se ha fragilizado, ha mutado. En este momento ando como un gallo sin cabeza mientras me pregunto: entonces, ¿qué diablos es la política?
A través de la historia de la humanidad se ha generado mucha teoría política; diversos personajes en distintas latitudes y en diferentes momentos de la historia han intervenido con su intelecto, sin embargo, me queda claro que muchas veces la teoría se queda en tinta y pensamientos, pues las cualidades humanas pocas veces prestan apertura a aquellas ideas que contravienen su bienestar en aras del bien común, de allí que, a lo que se proponga en materia política, el Yo hará oídos sordos.
Toda esta efervescencia que experimentaba y los hechos del mundo exterior me llevaron a acercarme a la obra de Nicolás Maquiavelo.
El fin no justifica mi despiste
En un viaje que hice a Florencia, Italia, hace unos siete años, tenía claro qué cosas quería hacer. Admirar lo más que se pudiera de la creación de la época renacentista de Italia: la arquitectura, la pintura, la escultura, la ciencia; mas no tenía nada en el radar sobre política, ni siquiera había pensado en ello. Hasta que hace unos días me enteré del personaje florentino que había dicho: “Un hombre que quiere ser bueno entre tantos que no lo son, labrará su propia ruina”. Nicolás Bernardo de Maquiavelo nació en Florencia, Italia, en 1469; fue escritor, filósofo, político y funcionario en el periodo renacentista y del cual tenía muy pocas referencias.
Esta última semana he estado leyendo y tratando de entender la obra "El Príncipe", de Maquiavelo. Un escrito corto, que se desarrolla en el contexto de la época medieval donde los personajes son príncipes, consejeros, campesinos, militares, etcétera. Al adentrarme en la lectura me doy cuenta que las descripciones que hace Maquiavelo no han perdido vigencia, después de casi seis siglos, con relación al manejo del poder y la política.
Maquiavélico
Aunque no es claro quién es el autor de la frase “el fin justifica los medios”, algunos la asignan a Maquiavelo. Bajo este supuesto, la importancia de la meta es esencial y habría que hacer lo que sea necesario para conseguirla. La siguiente frase sí la hallamos en "El Príncipe" y reza: “Las injusticias se deben hacer todas a la vez a fin de que, por probarlas menos, hagan menos daño; mientras que los favores deben hacerse poco a poco con el objetivo de que se aprecien mejor”.
La obra del pensador florentino es aleccionadora de cómo se hace política en la actualidad, rica en vivencias y comportamientos de los líderes que quieren el poder y perpetuarse en él, haciendo las maniobras que tengan que hacer para encumbrarse.
Pero, ¿qué dice Nicolás Maquiavelo y por qué considero que su obra "El Príncipe" continúa vigente hasta nuestros días? Descubrámoslo en la siguiente nota.
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