Xavian es un niño etíope que recientemente se robó el corazón de los mexicanos luego de que madre, Belaynesh Gebre, compartiera un video en el que se ve cómo el pequeño niño hacía un berrinche por no ser mexicano, ya que ama las quesadillas.
El video, publicado en Tiktok y que ya cuenta con más de 12 millones de vistas, capturó la atención de la mismísima Selección Mexicana, quienes después de una búsqueda incansable, lograron contactar a Xavian y su madre, quienes volaron hasta California para que el pequeño aficionado recibiera una gran sorpresa del Tricolor.
El escenario elegido fue el aeropuerto de Los Ángeles, ciudad en la que la Selección disputaría la final de la Copa Oro 2023. En un lindo clip compartido en las redes por el equipo mexicano, quedaron grabados los momentos en los que se puede ver al pequeño y a su madre llegando al aeropuerto, sumamente felices.
🇲🇽 Ser mexicano es un deseo que traspasa fronteras.
🫶🏻 Un Incondicional más a la familia 💚#MéxicoJuega pic.twitter.com/EMFcJRmMuz— Selección Nacional (@miseleccionmx) July 16, 2023
Aunque no les especificaron para qué los invitaron a Los Ángeles, el pequeño Xavian se llevó una enorme sorpresa cuando vio a Orbelín Pineda y Santi Giménez, quienes lo recibieron con mucho entusiasmo. “Xavian, hermano, ya eres mexicano”, explamó Pineda.
La emoción fue aún más grande cuando Santi y Orbelín le entregaron un jersey original de la Selección Mexicana y una buena ración de su comidad favorita; quesadillas. "Hola, mi gente, vamos a conocer a Xavian, que quería unas quesadillas. Le vamos a dar la sorpresa, le vamos a regalar un uniforme de la Selección y un muñeco", expresó el futbolista mientras recibía a Xavian en el hotel en donde se encontraba concentrado el equipo.
Xavian no quiso contener su emoción a recibir los regalos de las manos de Orbelín, e inmediatamente procedió a ponerse el shor y el jersey del Tri, abrazó el peluche de Kin (mascota del equipo) y, por supuesto, disfrutar de sus amadas quesadillas.
El amor de Xavian por México y las quesadillas es un bello ejemplo de cómo el amor por cosas como el fútbol y la comida pueden unir personas de diferentes culturas y país.
