En esta temporada invernal, las bajas temperaturas se hacen presente y muchos aseguran que en esta navidad ha sido más fría que otros años, y se ha visto reflejado en los perros en situación de calle, quienes han buscando algún espacio para mantenerse abrigados y poder pasar las heladas noches.
Para suerte de algunos, los albergues de animales han abierto sus puertas, ofreciendo abrigo y comida, sin embargo no todos los lomitos han podido ser parte de estas acciones. Este es el caso de una perrita mestiza que además de buscar un lugar cálido para ella, lo hacía por sus perritos que se encontraban prontos a nacer.
Desesperada por estar en sus últimos momentos antes de dar a luz esta perrita encuentra refugio en un tradicional pesebre en la calle, este por estar totalmente cubierto con telas simulando el establo y con paja en todo el suelo se tornó en un nacimiento representativo a uno real, pues fue el lugar donde este ser de cuatro patitas tuvo a una camada de seis cachorritos.
Las autoridades del lugar al darse cuenta la situación optaron por dejar que la perrita y sus cachorros ocuparan el lugar para su resguardo, además, conmovidos por la escena decidieron tomar algunas fotos y compartirlo a través de redes sociales. Los comentarios no tardaron en llegar mostrando que todas y todos llegaban a la misma conclusión: los milagros de Navidad existen y la perrita era prueba de eso.
"Ese sí es un nacimiento de verdaderos angelitos", "Navidad en su esplendor.....Maravilla de vida", "Este es el Nacimiento más bello que he visto", "La verdadera navidad".
Fueron algunas de las palabras que usuarias y usuarios compartieron antes las imágenes.
Hasta el momento las autoridades del lugar, así como visitantes, le han proporcionado agua y comida a la mamá para que pueda alimentar a sus cachorros, de igual manera están a la espera de que crezcan para poder invitar a la gente a adoptarlos responsablemente y puedan tener un hogar.
No cabe duda que esta situación impulsó acciones de corazón, mostrando y reviviendo el característico espíritu navideño de compartir con quienes más lo necesitan, sin importar si son peluditos de cuatro patitas.
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