En un esfuerzo por crear mejores condiciones de movilidad para Oaxaca, la Secretaría de Movilidad del gobierno del estado (Semovi), realiza el Proyecto de Semaforización y Señalización del Carril Preferente del CityBus Oaxaca, interviniendo entre ellos los cruceros de la Central de Abasto y el Parque del Amor, vías de comunicación caóticas para el paso de los peatones y automovilistas.
De acuerdo con Amparo Socorro Suárez, directora de Desarrollo y Regulación de Sistemas de Movilidad, se están reemplazando 48 semáforos en el mismo número de cruces del tramo San Lorenzo Cacaotepec a Santa Cruz Xoxocotlán del CityBus, cuya inversión para modernizar cada uno es de un millón mil 161 pesos.
Afirmó que estos cruces serán universalmente accesibles, lo cual mejorará la movilidad de los ciudadanos, principalmente en los sectores vulnerables como adultos mayores, niños, embarazadas y personas con discapacidad.
Para apartar lugares o para evitar que algún ciudadano haga uso de un lugar que ‘le pertenece’, distintos establecimientos incurren en una práctica muchas veces denunciada y pocas veces combatida: la ocupación del espacio y restricción del libre aparcamiento.
Este fenómeno, suscitado principalmente en las zonas céntricas de las ciudades, deriva de la necesidad de mantener ‘libres’ las calles para un mejor flujo vial y, también en gran medida, para ofrecer un plus a los clientes de los establecimientos, que buscan donde dejar sus vehículos cerca de sus destinos.
A pesar de la situación en la entidad y de que Oaxaca todavía se mantiene en color naranja en el semáforo epidemiológico de coronavirus (COVID-19), algunos sectores de la sociedad comienzan a relajar las medidas sanitarias.
Uno de estos sectores es el transporte, en donde taxistas de la zona de Santa Lucía del Camino, Santa Cruz Amilpas y San Francisco y San Sebastián Tutla, comienzan a retomar las antiguas prácticas de saturar sus unidades con hasta 6 pasajeros sin importar que entre ellos haya niños o adultos mayores.
Moisés Santiago, coordinador de la Cruz Roja Mexicana en Oaxaca, afirmó que en los últimos nueve meses han brindado más de 10 atenciones por caídas en alcantarillas y vía pública debido al mal estado que presentan.
Señaló que estas caídas no sólo son de transeúntes, sino también de ciclistas y motociclistas que circulan por las calles, además que en 2020 un motociclista murió por traumatismo craneoencefálico debido a que derrapó por una alcantarilla en mal estado.
El taxista Yair García afirma que ha visto un aumento de turismo en la capital; no obstante, aún esto no se refleja en más viajes como antes de la pandemia debido a los precios que ofrece la aplicación de viajes DiDi Taxi.
Señaló que durante estas semanas la aplicación está ofreciendo viajes por debajo del precio oficial que autorizó hace un año la Secretaría de Movilidad (Semovi), por lo que ellos deben hacer un mayor esfuerzo para conseguir clientes.
De acuerdo con el subdirector de Tránsito y Vialidad del municipio de Oaxaca de Juárez, René Ricárdez Limón, ha sido complicado que los automovilistas respeten el 1x1 en el Centro Histórico.
Aunque recordó que esta modalidad se implementó desde hace unos años, estos no han sido respetados, por lo que desde hace tres semanas decidieron colocar elementos de vialidad para acostumbrar a los automovilistas; no obstante, aún estando la autoridad, cruzan cuando nos les corresponde.
Vecinos de la Primera Etapa aseguran que el mal estado y las condiciones en las que se encuentra la mayoría de calles en la zona, se debe a la propia naturaleza del área, que se ubica en un lugar alto, con notables y pronunciadas subidas y bajadas.
Incluso, señalan que en comparación con lugares más ‘bajos’ o planos, como una parte del Centro Histórico, Trinidad de las Huertas o Candiani, en la Primera Etapa es ‘normal’ la formación de baches.
A pesar que los estándares internacionales señalan que debe haber un taxi por cada 200 habitantes, en Oaxaca la realidad es otra, ya que en el estado existe una unidad, ya sea foránea o local, por cada 179 personas.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), hasta 2019 en el estado había 23 mil 70 taxis foráneos y locales, cifra que aumentó un 6 por ciento respecto al 2017, a pesar de que desde 2019 existe una veda de concesiones.
Javier Gutiérrez, quien lleva más de 20 años trabajando como chofer de un urbano, compartió que cerca de 20% de sus compañeros de trabajo han renunciado debido a que no pueden completar la cuenta y no tienen ganancias debido a las medidas implementadas para evitar la propagación de la COVID-19.
Señaló que tan sólo en la ruta Rosario- Álamos han renunciado 8 de los 12 choferes que había, pues no consiguen reunir los mil pesos diarios solicitados por los dueños de las unidades, por lo que ahora se dedican a manejar mototaxis, trabajar de albañiles o vender alimentos.
