Un nuevo caso de violencia contra un menor conmociona a Chimalhuacán, pues lo que comenzó como una supuesta desaparición terminó siendo el asesinato de un niño de 5 años, quien tras varios días de búsqueda, fue localizado enterrado en su propia casa. Los principales sospechosos del crimen son su madre, Dulce “N” y su padrastro, Joel “N”, quienes ya fueron detenidos, informó la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), mediante un comunicado.
Fue el pasado 9 de noviembre cuando la madre del niño acudió a denunciar su desaparición, de acuerdo a su versión, iba caminando por una calle de la colonia Barrio Xochitenco, del municipio de Chimalhuacán, cuando le arrebataron a su hijo de la mano y lo subieron a un automóvil sin placas, huyendo con rumbo desconocido. Tras el reporte, se activó una Alerta Amber y se realizaron las respectivas pesquisas.
Pero el caso dio un giro de 180 grados, pues la desgarradora historia que la mujer narró estaba bastante alejada de la realidad. Como parte de las diligencias correspondientes al caso y la búsqueda del menor, personal de la FGJEM acudió a la casa del niño, ubicada en calle Prolongación de Todos los Santos, Barrio Xochiaca, Parte Alta, en Chimalhuacán.
Al realizar las revisiones correspondientes, el personal de la Fiscalía notó que en una parte del sitio tierra removida por una excavación, por lo que solicitó apoyo de peritos, en conjunto se realizaron las diligencias correspondientes y se encontró el cuerpo del pequeño Carlos Antonio enterrado en su propia casa.
Tras el hallazgo se procedió a poner bajo custodia policial a Dulce “N” , madre del niño y a Joel “N”, pareja sentimental de la mujer y padrastro de la víctima, por su probable relación en delitos vinculados con la desaparición de persona. Ambos fueron presentados ante el Agente del Ministerio Público por su posible relación en este ilícito, quien será el encargado de determinar su situación jurídica. En tanto, el domicilio quedó asegurado para continuar con las investigaciones correspondientes.
La Fiscalía puntualizó que a los detenidos se les debe considerar inocentes hasta que sea dictada una sentencia condenatoria en su contra.
