Ridouan Taghi fue conocido por manejar con extrema violencia su mando al frente de una organización criminal del narcotráfico que operaba en toda Europa gracias a la asociación que tuvo con narcos colombianos que buscaron expandir su dominio durante principios de la década de los 2010. El capo es mejor identificado como “El Ángel de la Muerte” y fue repudiado por sus detractores por su forma de operar.
Aunque Ridouan Taghi se dedicó a operar más en la logística del tráfico de drogas, tuvo algunos asesinatos que le fueron agenciados por la policía, se le contabilizaron por lo menos el homicidio de nueve personas, incluyendo la de un abogado de un testigo clave durante el juicio de uno de sus rivales. La víctima fue acribillada delante de su hija de 7 años de edad, según información del medio europeo RFI.
El narco más temido en Europa
Asimismo, dada la extrema violencia con la que operaba, que lo llevó a ser comparado con Pablo Emilio Escobar Gaviria, donde periodistas holandeses aseguraron que "Tagui es un poco plata o plomo", fue vinculado con los atentado que sufrieron dos medios de comunicación holandeses que denunciaron su actividad delictiva.
Los lazos de “El Ángel de la Muerte” con los narcotraficantes de Colombia data desde 2010, cuando los capos sudamericanos planearon expandirse hacia el viejo continente para la venta de cocaína, según reportes de la prensa francesa. Con dicha asociación, Taghi ganó poder hasta ser considerado como el narco con más poder en Europa.
La fortuna del “Ángel de la Muerte” se estimó en unos 100 millones de euros. Ridouan Taghi fue notificado con un ficha roja de la Interpol por lo que era buscado en más de 195 países en el mundo al ser considerado un peligroso criminal por lo que era el capo más temido en el continente europeo.
Fue atrapado por su basura
Tras casi dos décadas de operar dentro del narco, finalmente Ridouan Taghi fue capturado mientras se escondía en una villa de lujo en Dubai, país que hasta hace 3 años había entregado a 292 fugitivos de la ley internacionales.
El reinado violento del “Ángel de la Muerte” quien controlaba un tercio de las ventas totales de cocaína en el viejo continente, finalmente llegaría a su fin en 2020. El capo descansaba en una villa de lujo en Dubai. La operación para capturarlo se llevó a cabo en 10 días cuando los agentes de la policía identificaron su paradero.
Pero la identidad del capo pudo confirmarse gracias a que cada día un hombre salía del refugio para tirar la basura que producía el narcotraficante holandés de origen marroquí, informó el coronel Saeed Al Qemzi, director del departamento de personas buscadas de la policía de Dubai, a un diario local.
"Cuando pusimos la casa bajo vigilancia durante unos 10 días, vimos que un hombre salía cada noche a tirar la basura, lo que confirmó que alguien vivía allí”.
El capo fue descubierto que tenía a su mando a un grupo de sicarios identificados como los Ángeles de la Muerte, y solo era acompañado por el hombre que realizaba las labores domésticas
"Sólo el hombre que le ayudaba y le daba comida, salía de la casa para deshacerse de la basura", dijo el coronel.
“El Ángel de la Muerte”, de 41 años, fue trasladado a Nieuw Vosseveld, una prisión de máxima seguridad para terroristas y asesinos que cumplen condenas de por vida.
