Tuxtla Gutiérrez, la capital chiapaneca, ha vivido diversos episodios de terror. Entre éstos se encuentra el que en su momento fue un caso ampliamente condenado y comentado por las familias de ésta y otras ciudades del estado de Chiapas, incluso a nivel nacional.
Entre las historias más impactantes de este destino destaca el caso de Jimmy Virgilio Villatoro Argüello, el hombre que asesinó, desmembró y se comió el corazón de su pareja.
El año pasado justamente se cumplió una década de que el caso estremeció a la sociedad chiapaneca y que dio la vuelta al mundo en cuestión de horas por la violencia que puso al descubierto.
El hombre, tras haberse comprobado su responsabilidad, fue condenado a 50 años de cárcel, donde actualmente se encuentra; pero el proceso de este individuo fue complicado, pues hubo un momento en el que quedó en libertad y se temió lo peor en aquella entidad del sur de México.
Jimmy Virgilio Villatoro Argüello es un hombre que residía en la capital de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez. El hombre era pareja de Wendy L, una joven mujer de apenas 19 años de edad. Ella era oriunda del pueblo de Mapastepec y se trasladó a Tuxtla Gutiérrez en busca de un mejor destino para ella y su familia.
Pero en la capital del estado de Chiapas, el sueño y la vida de Wendy cambiaron radicalmente. De acuerdo con información de aquellos años, en el 2011, Wendy buscó ayuda tras el maltrato que sufría por parte del hombre. Ella fue a la Fiscalía de la Mujer de Chiapas y explicó al personal de esa dependencia que su pareja intentó quemarla y ahogarla con gasolina.
Pero las autoridades de aquél entonces nada pudieron hacer y dejaron a la joven mujer a su suerte, con todos y cada uno de los problemas que su pareja ya presentaba.
El crimenHace más de una década, Wendy junto su hijo Braulio de apenas tres años, salieron de Mapastepec. Ella buscaba continuar sus estudios de bachillerato; sin embargo, su sueño se truncaría para siempre.
Ya en Tuxtla Gutiérrez decidió terminar la relación con Jimmy Virgilio, de entonces 33 años, tiempo después inició un noviazgo. La gente que la conocía la describió como una muchacha de ojos almendrados, cejas semipobladas y nariz aguileña.
El 28 de abril de ese año, sus familiares perdieron contacto con Wendy, por lo que su padre, don Angel, se trasladó a la vivienda que la joven rentaba en la capital del estado chiapaneco pero ésta estaba vacía.
El afligido padre se dirigió a las autoridades y notificó la desaparición de su hija. Los datos de la joven madre fueron ingresados al apartado de personas extraviadas en el portal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
La búsqueda dio resultado, pero éste no era el esperado. El cuerpo de la chica fue hallado por pedazos en la misma ciudad, teniendo mayor presencia de éste en el mirador "Los Amorosos", ubicado en el libramiento norte de la ciudad.
Pero encontrar los trozos de su cuerpo no fue poco, también se supo que el corazón de esta mujer había sido comido por su pareja quien posteriormente se ganó el sobrenombre de "El caníbal de Tuxtla".
Jimmy Virgilio declaró lo que había hecho y cómo había actuado contra Wendy. También dio detalles a las autoridades que había grabado un video en donde constaban las atrocidades cometida. El clip jamás salió a la luz pero sirvió de prueba para que el sádico hombre fuera ingresado a la cárcel.
Pero el 12 de febrero de 2019 "el Caníbal" fue liberado mediante un amparo. Esta acción judicial sembró el terror en todo Tuxtla, y en general, en todo Chiapas.
Ese mismo años, los grupos colectivos feministas realizaron diversas acciones, entre ellas marchas y protestas exigiendo justicia para la joven asesinada. Estas acciones imprimieron presión al gobierno chiapaneco de aquellos años, por lo que la administración no dudó en volver a encarcelar al conocido "Caníbal".
Tras este proceso, su sentencia aumentó a 50 años.
