Siempre es un dilema elegir qué comer y dónde, sobre todo si vives en Oaxaca, pues es uno de los lugares con más opciones en cuanto a gastronomía se refiere. Durante estas fiestas de julio se organizó por vez primera la Semana de los Antojos, en la Plaza de la Danza. En este espacio encontrarás una gran variedad de opciones en cuanto antojitos, bebidas y dulces típicos.
En este desfile de sabores y aromas es necesario destacar algunos de los más solicitados, pues las enormes filas que se forman en los puestos los respaldan.
Las garnachas del Istmo
Las garnachas son uno de los antojitos más solicitados de la región del Istmo. FOTO: Erubiel Zurita
Hablar de esta región de Oaxaca es hablar de diversidad. Sus mercados se encuentran llenos de colores y sabores. Uno de sus platillos más solicitados son las garnachas, eas pequeñas tortillas de maíz que se fríen en aceite vegetal, con carne de res, que se les agrega salsa de tomate y chile de árbol. Estas delicias se sirven por orden de cinco garnachitas y se acompañan con curtido de col, zanahoria picada y chiles jalapeños en vinagre.
Tlayuda, la reina
Algunas tlayudas se sirven extendidas y son más similares a una tostada. FOTO: Erubiel Zurita
En la ciudad hay un antojito que es el más solicitado y conocido incluso a nivel internacional: la Tlayuda. Es una gran tortilla a la que se le agrega asiento (grasa espesa y quemada que resulta de la fritura del chicharrón), quesillo, col o lechuga, guacamole y en algunos casos con tomate. Una vez que tiene todos los ingredientes se doblan y se prensan al carbón, convirtiéndolas en unas “quesadillas” gigantes que se acompañan con un trozo de carne, ya sea tasajo, cecina, chorizo o incluso tripas.
En algunos establecimientos se ofrece la tlayuda extendida, por lo regular es como una tostada y en esta presentación es común que se le agregue tomate y aguacate en rebanadas.
Los deliciosos molotes
La mayoría de tamales son envueltos en hoja de maíz. Los de mole son cubiertos por hojas de plátano. FOTO: Erubiel Zurita
Estos pequeños bocadillos de maíz están rellenos de papa con chorizo, como lo manda la tradición en Ejutla de Crespo; son revestidos con guacamole o frijol y se espolvorea queso. A diferencia de otros antojitos, el molote se elabora con las manos, sin el uso de tortilleras o algún otro utensilio. Son fritos y se sirven encima de una hoja de lechuga. Se acompaña con rábanos.
Tamales de Huayápam
La mayoría de tamales son envueltos en hoja de maíz. Los de mole son cubiertos por hojas de plátano. FOTO: Erubiel Zurita
Tamales hay en gran parte del territorio mexicano, pero Oaxaca tiene sus propias aportaciones. En San Andrés Huayápam existe un tamal endémico de esta localidad, el famoso mole llamado chichilo.
Sin embargo en este municipio también se pueden conseguir de chepil, rajas, salsa verde, flor de calabaza con quesillo y los de mole. Las hojas que los envuelven no alteran su sabor, a excepción de los que se envuelven en hoja de plátano.
Tostadas de Ejutla
¡Ya llegaron las tostadas! Son tradicionales en Ejutla de Crespo, municipio de los Valles Centrales. Su principal ingrediente es la salchicha ejuteca, la cual, a diferencia de la de la capital, no lleva ningún colorante y es ahumada en horno de leña. También pueden prepararse con queso de puerco. Estas tostadas se fríen con manteca y son servidas con guacamole, pasta de frijol, col, tomate, cilantro y rajas en escabeche.
La gran ventaja de la Semana de los Antojos es que puedes conseguir cualquiera de ellos en un sólo lugar, así que si todavía no has asistido y quieres llevarte el sabor de Oaxaca, esta es tu oportunidad.
