Para protegerlos de la piratería, el gobierno de Oaxaca solicitó al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) otorgar la Indicación Geográfica a los alebrijes, figuras artesanales propias de San Martín Tilcajete y San Antonio Arrazola.
De esta manera, sería regulada y prohibida la entrada de cualquier figura tallada en madera que busque ser ingresada al país con el nombre de alebrije.
La Indicación Geográfica, detalla el IMPI en su página oficial, “se utiliza para identificar productos cuyas características son otorgadas por las cualidades naturales del medio geográfico donde se produce. A pesar de que en otras zonas encontremos productos del mismo género, la Indicación Geográfica no asegura que el nombre del lugar que complementa la identificación del producto va acompañado de características particulares y exclusivas”.
Por otro lado, la Ley de la Propiedad Industrial define el concepto de la Indicación Geográfica como “el nombre de una zona geográfica o que contenga dicho nombre, u otra indicación conocida por hacer referencia a la citada zona, que identifique un producto como originario de la misma, cuando determinada calidad, reputación u otra característica del producto sea imputable fundamentalmente a su origen geográfico”.
La Secretaría de Economía del Gobierno de Oaxaca ha informado que ya envió el proyecto al IMPI con el objetivo de brindar protección en materia industrial a nivel nacional e internacional a las figuras de madera talladas por manos artesanas.
Al mismo tiempo buscan dar valor agregado a los alebrijes para que cuando pretendan ser exportadas, obtengan un certificado de denominación de origen para que puedan ser sujeta de ventas en el mercado global.
Los alebrijes, son figuras talladas en copal y pintadas a mano finamente.
Cada pieza es única porque refleja las raíces de los pueblos que las producen.
