El gobierno de Enrique Peña Nieto “rasuró” a 119 mil 300 oaxaqueños del padrón de beneficiarios del Sistema de Protección Social en Salud, Seguro Popular, que representó un recorte de 4.3% en el número de derechohabientes del cierre de 2015 a septiembre de 2018, de acuerdo a la base de datos abiertos de la Secretaría del Bienestar.
“Ni es seguro, ni es popular”, censuró el entonces presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, a finales de julio del año pasado al señalar que el programa al menos cambiaría de nombre, que repitió en diferentes momentos para que, en diciembre de 2018, ya como presidente, anunciara por primera vez la desaparición del plan de asistencia social que, hasta mayo de 2019, cobijaba a 2 millones 637 mil 807 oaxaqueños.
Con una población de 4 millones 098 mil 693 personas, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) al primer trimestre de este año, el Seguro Popular brinda protección social a dos de cada tres oaxaqueños, el 64% de la población del estado y tiene afiliados esparcidos en los 570 municipios de la geografía estatal.
El programa creado en 2004, hace 15 años, por el gobierrno del panista Vicente Fox inició con 155 mil 143 afiliados en Oaxaca el año de arranque y tuvo su masificación entre 2009, con un millón y medio de empadronados a poco más de dos millones en 2010 y do millones 620 mil oaxaqueños inscritos en 2011, de acuerdo a la base de datos elaborada por NOTICIAS, Voz e Imagen de Oaxaca con estadísticas del programa.
En marzo de este año el presidente, al cumplirse 100 días de su gobierno, insistió en la desaparición del Seguro Popular al ofrecer más datos como la corrupción en la compra de medicamentos mediante adjudicación directa, beneficiando a sólo tres empresas en detrimento de la salud, la calidad y censuró la inadecuada atención a derechohabientes del Seguro Popular en clínicas estatales y municipales pero que alcanzaba al IMSS e ISSSTE.
Récord en 2014
Oaxaca alcanzó la cifra más alta de inscritos al Seguro Popular en 2014, con poco más de2 millones 757 mil derechohabientes, cifra que se mantuvo el año siguiente, 2015, de tal suerte que la cobertura de ese plan de asistencia alcanzaba a alrededor del 70% de la población con lo que, en el último trienio del gobierno peñista se perdieron casi 6 puntos porcentuales en cobertura estatal.
Incluso el recorte había sido mayor, 32 mil 34 derechohabientes, pues en junio de 2018 el ajuste bajó la cifra a 2 millones 605 mil oaxaqueños, un recorte de 1.2% respecto a los 2 millones 637 mil empadronados al cierre de 2017; sin embargo, en tres meses “reafiliaron” a los eliminados para alcanzar la cifra del año previo.
En este achicamiento de padrón del Sistema de Protección Social en Salud es donde podríamos hallar una de las tantas razones del crecimiento de 15% en la cifra de pobres en Oaxaca en la última década, 2008-2018, señalada el lunes 5 de agosto por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval); en la entidad hay 360 mil pobres más que hace diez años.
De acuerdo a esa instancia, el año pasado 3 millones 116 mil oaxaqueños carecían de acceso a la seguridad social, un aumento de 56 mil personas respecto a 2018. Sin embargo, 665 mil oaxaqueños carecen de servicios de salud, en dos años, de 2016 a 2018, 23 mil oaxaqueños perdieron o se sumaron a la cifra de quienes no pueden ser atendidos por programas sanitarios en el estado, un repunte de 3.6% respecto a los 642 mil que no contaban con servicios médicos en 2016.
El padrón oaxaqueño representa el 4.9% de la cobertura nacional, es oaxaqueño uno de cada 20 mexicanos beneficiarios del Seguro Popular.
El 7 de febrero de 2019 la Comisión Nacional de Protección Social en Salud y el gobierno de Oaxaca, a través de los titulares de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) y el Régimen Estatal de Protección Social en Salud del Estado de Oaxaca (REPSS) fijaron una meta de afiliación de 2 millones 637 mil 807 personas para este año que sería respaldada con recursos federales para “Prospera o aquel programa que lo sustituya” y, además de la digitalización de expedientes de los núcleos familiares “para facilitar el acceso y organización, reduciendo espacios físicos y uso de papel, en diciembre deberán tener el 75% digitalizados.
Al cierre de mayo, Oaxaca tiene el sexto padrón más abultado del país, superado por Veracruz, Chiapas, Puebla, Estado de México y la ciudad de México; la capital del país apenas tiene 111 mil inscritos más que nuestro estado.
