Ana Lilia Pacheco
Zehidy Aguilar Romero, licenciada en Terapia Física y de Rehabilitación, afirma que es necesario que haya un área de rehabilitación en las áreas de urgencias médicas de COVID-19, pues actualmente no existe en el sector salud.
Explicó que los pacientes al estar acostados e inmovilizados, pueden presentar distintas molestias y enfermedades como úlceras o fibrosis en la musculatura; no obstante, algunas enfermeras y médicos han tenido que suplir esta necesidad.
Lamentó que aunque los terapeutas físicos están capacitados para brindar atención a pacientes COVID, así como personas recuperadas del virus, han sido los médicos quienes han suplido la función de ellos, pues no hay presupuestos para contratarlos.
La especialista explicó que cuando un paciente está hospitalizado, necesita que se les cambie de posición y brindar masajes y distintas atenciones, por lo que aseguró que sus colegas son importantes en la primera línea de atención.
Compartió que algunos médicos y enfermeras han dado rehabilitación a pacientes recuperados de la COVID-19; no obstante, cada paciente necesita un tratamiento diferente.
“Hay diferentes tipos de rehabilitación, algunas para trabajar con secreciones y función pulmonar, ejercicios de respiración que recomiendan los médicos y enfermeras, pero es necesario que haya terapeutas porque las secuelas son diferentes”, subrayó.
Zehidy Aguilar mencionó que ha visto distintas actividades para rehabilitación en videos de redes sociales como soplar silbatos, hacer burbujas, inflar globos, entre otros; sin embargo, señaló que estas no servirían para secreciones profundas, que se deben acompañar de medicamentos.
“Si un paciente tiene tos crónica, no puede hacer ejercicios de los videos tutoriales porque se puede desmayar o ahogar. El tratamiento de terapia física va ligado al paciente y las evaluaciones que se están haciendo. Primero deben hacerse los tratamientos para respirar bien, que esté tranquilo y ya después ejercicios para fortalecer”, expone.
Por ello, señaló que falta educar a la sociedad, pacientes, y también al internet, porque “aunque todo se encuentra ahí, es necesario que las personas consulten a algún médico y les recomiende que tipo de rehabilitación necesitan”.
