Nadia Altamirano Díaz
La incidencia de contagios de COVID-19 en Oaxaca poco a poco vuelven a asemejar la tendencia previa a finales de 2021, cuando las reuniones familiares y la presencia en lugares concurridos impulsó la propagación de la variante ómicron.
Este sábado con 72 nuevos casos, la semana epidemiológica que empezó el domingo 13 de marzo con 17 notificados, cerró con 407, por debajo del promedio de 60 contagios identificados por día y apenas el 40 por ciento de lo reportado la semana anterior.
Entre el domingo 6 de marzo -un día previo a que Oaxaca cambiara su semáforo epidémico de amarillo a verde- y el sábado 12 se notificaron mil 12 contagios, pero para la semana que comenzó el domingo 13 hubo una disminución del 60 por ciento.
En esta semana la cifra más alta se reportó el lunes 14 de marzo con 131 contagios, casi una décima parte de los más de mil contagios diarios que se reportaron de manera consecutiva entre el 25 y 29 de enero, antes de que el pico de la pandemia comenzó un ligero declive.
Después de que enero rompió récord y acumuló 17 mil 73 contagios, la cifra más alta de la pandemia, todavía le siguió febrero con 15 mil 288, pero marzo logró marcar el descenso de contagios con 2 mil 549 en 19 días.
A partir del lunes 7 de marzo Oaxaca está en semáforo epidémico verde y se mantendrá así hasta el próximo domingo 3 de abril, como el resto del país, a pesar de que ayer informó de 4 mil 114 casos y 141 muertes por COVID-19.
La salida del repunte más álgidos de contagios se logra en medio de la detección de una recombinación de las variantes delta y ómicron, de la cual se contabilizan 49 casos en cinco países de Europa, principalmente Francia.
La Organización Mundial de la Salud no ha aceptado llamar a esta nueva variante AY.4/BA.1 como deltacrón, pero éste nombre se populariza en medio de la expectativa de si mantendrá su “baja circulación” o qué estragos propiciará en el mundo.
Ayer
72 nuevos contagios
2 muertes
