Las promociones comerciales de pagos sin intereses con tarjetas pasan de noche para los oaxaqueños, quienes prefieren realizar sus compras de contado y por montos que pueden alcanzar hasta los 70 mil pesos, señaló el distribuidor de mercancías en tiendas departamentales, Martín Sánchez.
El experto refiere que en este sistema de pago Oaxaca se encuentra por encima de Veracruz, Tabasco y Chiapas, en donde los compradores prefieren pagar mensualmente por los artículos adquiridos.
Las remeses se colocan como el factor principal para el registro de este fenómeno en la entidad, apuntó el comerciante, quien agregó que desde su experiencia ha percibido que las personas que más compran en grandes cantidades se encuentran en los municipios de Tlacolula y Huajuapan, además de Puerto Escondido y Salina Cruz.
Para el caso de los clientes de Tlacolula -apuntó- son capaces de comprar a contado productos de línea blanca por montos de hasta 70 mil pesos.
“Es un fenómeno que sorprende en las cabeceras municipales, a donde llegan muchos habitantes de diferentes comunidades para renovar sus productos
Ofertas reales
“Para este año las ofertas de El Buen Fin vuelven a ser reales”, afirma el también promotor comercial.
Martín Sánchez reconoció que en los últimos tres años las ventas durante El Buen Fin habían registrado una disminución debido a que se perdió la credibilidad en las ofertas, pues las empresas comenzaron a aprovechar esta actividad para rematar sus artículos de modelos anteriores y no promocionar los nuevos.
Para este año, afirma el comerciante, las empresas de talla nacional retomaron el sentido de las promociones de artículos recientes e incluso de nuevos modelos, afirmó.
Por otra parte, el vendedor indicó que algunas empresas departamentales mantienen precios más accesibles cuando se paga de contado, mientras que pagar a crédito representa en muchas ocasiones pagar hasta 15 por ciento más por el producto.
Sigue pagando la pantalla de hace un año
La tentación por adquirir un producto en “promoción” llevó a la señora María de Jesús a endeudarse por dos años; por lo que este año se abstendrá de compras que considere innecesarias.
Hace un año –durante El Buen Fin– impulsada aún por el fervor de las pantallas de plasma, la mujer decidió adquirir una a 24 meses sin intereses. Al efectuar la compra, el ama de casa no pensó que esos pagos representarían a largo plazo en una fuerte carga económica.
Cada mes la señora debe pagar 499 pesos por el artículo y cuando por alguna crisis no puede realizar el pago de manera puntual le cobran recargos. Por lo que al final pagará poco más de 12 mil pesos por su pantalla de 50 pulgadas.
La mujer advirtió al resto de los consumidores a tomar sus previsiones al momento de comprar un artículo o disponen de un servicio, sobre todo considerar si sus ingresos serán los mismos durante el plazo en que mantendrán la deuda.
Remesas, la clave del consumo de contado
En Buen Fin, descuentos del 10% al 50%
15% más caro cuando se compra a crédito
