Ana Lilia Pacheco
Un grupo de vendedoras de alimentos tradicionales del Centro Histórico se manifestó frente al palacio municipal de Oaxaca de Juárez para solicitar que les permitan vender los días miércoles, ya que han sido retiradas de sus espacios debido al programa “miércoles sin ambulantes”.
Acompañadas de la Red de Mujeres para una Vida Libre de Violencia (Remuvi), denunciaron que el Ayuntamiento les ha restringido sus pagos por derecho de sus permisos, además de que están siendo tratadas como comerciantes semifijas, pero ellas son cocineras tradicionales.
Relataron que el pasado 21 de febrero, el Ayuntamiento notificó a las cocineras que ya no podrían instalarse en las inmediaciones del Mercado 20 de Noviembre, derivado del punto de acuerdo en el que se instruye a recuperar espacios de la vía pública utilizados por comerciantes.
Señalaron que siempre han cumplido con todas las obligaciones que marca la normatividad municipal y desde hace más de 30 años que han estado en ese lugar; no obstante, desde enero pasado no les han querido recibir los pagos.
Generan empleos
Subrayaron que esta actividad que realizan es importante para la economía de la capital oaxaqueña, ya que genera empleos de la que dependen varias familias que también están siendo afectadas por la disposición.
“El Ayuntamiento atenta también contra el sustento económico de mujeres proveedoras de sus hogares, mujeres trabajadoras que desde hace décadas se han dedicado a la cocina tradicional, a la que han convertido además en un mecanismo de liberación del sistema patriarcal y machista, pues con estos trabajos, las mujeres se han vuelto independientes y han logrado sacar adelante a sus familias”, destacaron.
Del mismo modo, informaron que aunque fueron atendidas el pasado miércoles por la Directora de Comercio en la Vía Pública, ésta no les resolvió nada, por lo que lamentaron la pérdida de tiempo que tuvieron con ella y decidieron volver a manifestarse.
Para finalizar, Sofía Martínez, presidenta de la Red de Mujeres para una Vida Libre de Violencia (Remuvi), mencionó que esta actividad culinaria fue declarada por la UNESCO en el año 2010 como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad, como parte de la cultura comunitaria ancestral y viva.
30
años han trabajado vendedoras de alimentos tradicionales
“El Ayuntamiento atenta también contra el sustento económico de mujeres proveedoras de sus hogares, mujeres trabajadoras que desde hace décadas se han dedicado a la cocina tradicional". Vendedoras de alimentos tradicionales
